VIII: Sistema que nadie quiere

649 94 13
                                    

Ha pasado dos semanas desde que Yunyun se unió al equipo de Kazuma y Kazuma está muy agradecido de haberla reclutado, ella no solo era una maga muy competente, ella sola podía hacer el trabajo de las otras tres miembros del equipo.

Kazuma se preguntó porque no la había conocido antes que las demás, pero arrepentirse ahora era inútil, solo esperaba que las tres no la contaminarán con sus locuras, cosa que Kazuma veía muy difícil, porque ahora estaba viendo cómo Yunyun corría de Megumin llena de baba que corría de una rana que la quería devorarla.

Si, era difícil mantener a alguien cuerdo con su grupo cerca, el mismo era consiente que no era el más indicado para decir que era estar en lo normal, morir y volver a revivir por una diosa como si estuviera jugando con una especie de nigromante que invoca a soldados para luchar por el, solo que el era el soldado que escaparía si tuviera la oportunidad, si, no era lo más normal del mundo.

Sacando su espada, en unos segundos apareció delante de las ranas inmóviles que tenían a Aqua y Darknees atrapadas, perforó sus abdomenes como mantequilla caliente, su espada cortaba muy bien y le agradaba mucho.

Luego de haber rescatado a las dos se dirigió a Yunyun y Megumin que estaban en la misma situación por culpa de Megumin que atrapó a Yunyun razón por lo que la rana los metió en su boca.

Con cuatro mujeres llenas de baba fue inevitable que los murmullos con palabras e insultos desagradables se dirigieran a Kazuma, si las miradas hablarán, seguramente también le hubieran dicho que lo iban a matar.

Las cuatro miembros de su equipo decidieron ir a la mansión a bañarse y quitar la baba pegajosa, por lo que Kazuma fue solo al gremio a recojer la recompensa de la cacería de ranas.

Abriendo las puertas del gremio encontró la vista que desde que llegó a este mundo, los aventureros bebiendo, algunos recibiendo recompensa de un trabajo realizado, buscando un trabajo que realizar, las hermosas camareras llevando comida, la hermosa Luna en la recepción como siempre, ese aventurero que nunca salía del tablón de trabajos.

Era una vista que ya estaba acostumbrado a ver casi a diario, una vista que le trajo un sentimiento de alegría, en su anterior mundo todo esto sería imposible, no tenía muchos amigos, ni siquiera conocidos cercanos con los que salir a tomar un trago, además que debido a varios sucesos termino viviendo en solitario para alejarse de todo ello.

Nunca hubiera pensado que agradecería haber muerto para poder vivir una vida nueva, y uno donde la magia existe y podía ir de aventura, aunque lo que quiere es alejarse de lo peligroso pero la sensación de adrenalina que surge le da la motivación para seguir siendo un aventurero, aunque sea el aventurero más débil.

Si, se dió cuenta que era el más débil, no solo por qué tiene un título que se lo dice, no, pregunto con la bella Luna sobre los parámetros de los aventureros nuevos solo para caer en depresión un minuto después de la explicación de Luna.

Al parecer cada aventurero por más débil que sea siempre empiezan, su que con diferentes números, ninguno menor a veinte, de hecho solo tomaron ese número por qué era lo mínimo que podía llegar la suerte, según Luna, un aventurero nuevo y en promedio tiene entre 25-30 en sus atributos.

Por eso fue honesta en decir que cuando vio a Kazuma se sorprendió por qué sus parámetros eran absurdamente bajos a excepción de su suerte demasiado alta, y a Aqua quien tenía la suerte más baja que había visto.

Kazuma se deprimió por que apresar de ya tener meses en el nuevo mundo todavía ningún parámetro, a excepción de su suerte, no pasaba de veinte.

Y eso que se esforzaba para volverse fuerte, bueno, lo intentaba, y ahora que subir un punto era todavía más difícil de lo que debía, ya se había resignado ha permanecer en lo más bajo de lo bajo.

Kazuma - [Bendito Aventurero Nivel 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora