la muerte no siempre es el final, las personas suelen aferrarse a algo, o a alguien. Él se aferró a su casa, en ella guardaba mil recuerdos... hasta que llegó ella.
el talento en su voz lo llevo a una ligera obsesión, hasta que le propuso un trato e...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• sombras •
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narrador omnisciente.
¿Cuántos de nosotros hemos perdonado y aún así deseado que algo le pase a la persona que nos daño?...
Las noches desde la muerte de Beatriz habían sido tortuosas para Thomas, sueños y pesadillas lo atormentaban en la noche.
Su vida volvía a ser tan miserable como cuando él estaba muerto, añorando lo que él se había encargado de matar…
A veces Thomas creía escuchar los lamentos de Beatriz, a veces el piano, a veces su voz cantando… pero ¿El alma de Beatriz no podía ser o si?
Cada que se acercaba al piano las náuseas se apoderaban de su cuerpo enviándolo directo al baño.
No había vuelto a cantar o tocar, eso le causaba una nostalgia y melancolía enorme.
Las noches frías del invierno comenzaban, la nieve comenzaba a cubrir la copa de los árboles.
Las sombras comenzaban a jugarle mal a Thomas quien creía se estaba volviendo loco, había comenzado a ver espectros que lo asustaban en la noche.
El sonido del piano era lo que más loco le volvía, no sabía si era real o un producto de su imaginación, no sabía si beatriz rondaba como fantasma o el lo deseaba tanto que lo imaginaba.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
