𝑬𝑳 𝑪𝑶𝑺𝑻𝑶 𝑫𝑬𝑳 𝑶𝑳𝑽𝑰𝑫𝑶 [𝐉𝐞𝐥𝐬𝐚]

Eres

Después de doblar la carta en forma de avión y dejar que el viento se la llevara, la chica suspiró y una tenue sonrisa se formó en su rostro.

Miró al horizonte, el sol estaba apunto de juntarse con el mar, señal de que pronto caería el atardecer.

La princesa se dispuso a caminar hacia el árbol donde Jack y ella solían verse, el peliblanco la recibió con un pequeño beso en los labios y se sentaron para platicar como de costumbre.

-Entonces yo salté, ¡y la señora estaba furiosa! ¡La hubieras visto, tenía toda la cara llena de nieve!-soltó una carcajada- Y luego dijo "Me las pagarás, niño insolente"- imitó a una mujer con voz rasposa mientras se ponía las manos en la cintura, a lo que la castaña rió divertida.

A Elsa le encantaba que Jack le contara sus historias, se veía tan tierno cuando estaba emocionado, sus mejillas se coloreaban de un tono ligeramente rosado y unos hoyuelos complementaban su blanca sonrisa.

Después de un rato de pláticas y risas, hubo un momento en el que ambos se quedaron en silencio, observando como caían suavemente las hojas del árbol sobre el pequeño lago que estaba frente a ellos.

La chica se quedó viendo su reflejo pensativa, su aspecto había cambiado mucho desde el día en el que perdió sus poderes, empezando por el evidente hecho de que su cabello y sus ojos ahora eran cafés. Pero esto iba más allá del aspecto físico, sus poderes habían sido algo característico de ella toda la vida y sin ellos todo se sentía tan... diferente.

-¿Todo bien?- preguntó Jack al notar el silencio de Elsa.

-Si, ¿por qué no lo estaría?- contestó sin mirarlo a la cara.

-Hey, somos novios, podemos confiar el uno en el otro, ¿no?-el chico tomó su mejilla con delicadeza para atraer su mirada a él y le brindó una cálida sonrisa, la castaña suspiró, el peliblanco la conocía muy bien.

-Antes anhelaba no tener poderes y ser "normal", y ahora que los perdí siento que me falta una parte de mi. Sin ellos ¿quién se supone que soy ahora? No me reconozco, Jack.- arrugó el entrecejo y observó sus propias manos con una expresión triste.

-Eres magia, Elsa, y no te das cuenta- tomó sus manos y depositó suavemente un beso en sus nudillos- No puedo describirte solo con palabras porque nunca me alcanzarían para definir lo maravillosa que eres.

Elsa, tu eres luz a donde quiera que vayas, con tu sola presencia transformas todo a tu alrededor.

Eres alegría, eres paz, eres amor, con solo una sonrisa, una mirada, un acto amable, un abrazo... transformaste mi vida, y no necesitas poderes para eso.- la chica estaba ruborizada y con los ojos llorosos conmovida por aquellas palabras-Además... ¿sabías que las castañas me vuelven loco?- rompió el hielo como siempre, Elsa soltó una carcajada y lo abrazó con fuerza mientras unas lágrimas de alegría corrían por sus mejillas, no sabía como, pero el chico siempre tenía las palabras correctas para hacerla sonreír.

-Algo debí haber hecho bien para merecerte, Jack.

-Es al revés, princesa-juntaron sus frentes y se sonrieron con ternura, la castaña le dio un pequeño beso en los labios y después recargó su cabeza en su hombro.

El guardián se quedó dormido al poco tiempo, Elsa lo miró con cariño, su respiración era tranquila y su rostro no denotaba preocupación alguna.

La castaña se acurrucó a su lado y después de un rato también se quedó dormida, de alguna forma Jack siempre terminaba siendo su lugar seguro, él la escuchaba y siempre la hacía reír, no podía imaginar algo mejor que estar a su lado...

Hubiera querido que ese momento se pausara y vivirlo para siempre.

Pero lamentablemente, la vida no funciona así.

Holaaaa gente, ¿cómo están?

Hice este capítulo con el corazón, espero les guste tanto como a mí me gustó escribirlo ♡

Caray jelsa es hermoso ♥︎

Ojalá pueda subir el próximo pronto, así que hasta entonces gente :)

Y como siempre digo, muchas gracias por su apoyo, votos, comentarios y paciencia, en serio lo aprecio bastante <3

Saludos y abrazos ♡
(Sorry, hoy ando muy cursi, les tocará soportar jajajs)