💀6💀

1.4K 185 14
                                    

Capítulo 6.

-Me voy a arrepentir de esto.- suspiró Stiles saliendo de su escondite para enfrentar a los extraños. -Ustedes no son del FBI, ¿verdad?

El efecto de las palabras de Stiles fue inmediato, ambos desconocidos se tensaron quedándose muy quietos en su lugar, enseguida intentaron inventar una excusa, nada creíble para Stiles que era un experto en mentiras improvisadas.

-Logre ver lo que tenían en la cajuela. No hace falta que sigan mintiendo.- simplificó el chico con una sonrisa. ‐¿Son cazadores? Ya saben, de criaturas sobrenaturales y eso.

-Pues... si.- admitió finalmente el más alto en un tierno tono conciliador. -Mi nombre es Sam, él es mi hermano Dean... creo que ya se conocen.

-Por desgracia.- dijo Stiles desviando la mirada.

-No decías lo mismo esa noche.- afirmó el tal Dean con una sonrisa, Stiles casi le soltaba un puñetazo, casi, pero el timbre de su celular calmó sus impulsos y lo obligó a responder la llama de Parrish.

-Sigues en el estacionamiento.- habló la voz de Parrish en la bocina del teléfono.

-Creí que bromeabas cuando dijiste lo del rastreador. -fue lo que dijo Stiles.

-No entiendo porqué bromearia.- respondió Parrish.

-Ya, lo tendré en mente. Revisaba que mi bebé no tuviera rasguños y justo estaba por entrar al auto e irme a casa como te dije.

-Tienes diez minutos para llegar a casa.- amenazó Jordan.

-El camino es de veinte.- rezongó Stiles subiéndose al jeep.

-Diez minutos, y sin desvíos.- sin más Parrish cortó la llamada.

Stiles encendió el auto y bajó el cristal para gritar a los extraños que seguían esperando alguna señal de él.

-Vamos chicos, les diré que es lo que están cazando.

Sin más, confiando en que lo seguirían, Stiles aceleró a fondo, tenía nueve minutos exactos para llegar a casa, estaba seguro de que Parrish no se molestaría si tardaba más, pero la idea de restregar su victoria en la cara del sabueso lo ponía de buen humor, cuando iba a la comisaría a recoger a su padre solían hacer carreras hasta llegar a su hogar.
Stiles suspiró triste al estacionar en su casa, los extraños lo habían seguido de cerca y parquearon en acera de enfrente, el castaño tecleo en su teléfono a Parrish para avisarle que había llegado y que prepararía la cena para cuando volviera.

-¿Estás bien?- le habló el que había presentado como Sam, tenía una mirada de cachorrito que a Stiles le gustó, seguramente el alto podría lograr que las personas hicieran cualquier cosa con esos ojitos brillantes.

-Si. Pasen.- cortó Stiles dirigiéndose a la puerta de su casa.

Una vez que todos entraron, preguntándose cada uno si lo que hacían era correcto, se quedaron en un silencio incómodo, los cazadores tratando de no mirar demasiado y el más joven atrapado en sus pensamientos.

-Bueno, supongo que puedo empezar yo.- dijo Stiles acercándose a la cocina. ‐¿Les gusta la pasta?

El adolescente comenzó a preparar la comida mientras le hablaba a los cazadores de todo lo que sabía, desde McCall siendo mordido hasta Hale marchándose del pueblo, también mencionó a cada monstruo que había acechado el pueblo, evitó contar las muertes que había tenido que afrontar pero después tuvo que llegar al asunto de su padre. Fue una fortuna cortar cebolla mientras hablaba porque eso hizo que sus lágrimas silenciosas tuvieran más sentido.

Compartió sus avances en la investigación sobre la última quimera y lo que conocía de los doctores del miedo, informó a los cazadores sobre Theo y las demás quimeras, se dió cuenta de que había hablado de más al mencionar que ya no formaba parte de la manada McCall porque en ese momento el tipo ojos de cachorro los usó para preguntarle cual era la razón de eso.

-Mi padre está muerto por esto.- soltó Stiles sacando un frasco de su chamarra, dentro del frasco había una punta rota de un hueso. -Una de las quimeras lo atacó, era parte Berserker, una criatura nauseabunda, los doctores no encontraron a tiempo esta pequeña astilla y mi padre murió, Theo envió a esa quimera a lastimar a mi padre para amenazarme y obligarme a unirme a él.- la voz del castaño se fue apagando con cada palabra. -La culpa es de Scott McCall, que piensa que la gente siempre será buena y que en este maldito pueblo pueda llegar un tipo con vibra extraña y no pasa nada. Y también es mi culpa, por no dejar a la manada antes, me importaba tanto... y ahora lo más importante ya no lo tengo.

-Sé que no nos conocemos.- habló el cazador rubio. -Y sé que nuestra primera impresión no fue muy agradable, pero por todo lo que haz dicho, estoy seguro de que no es tu culpa así que no pienses eso. Eres un buen chico, y si mi hermano y yo vamos a cazar a alguien definitivamente serán a todos los que mencionaste. -volvieron a quedarse en silencio pero el rubio se levantó de su asiento. -Voy a ver que tenemos en el auto, quiero asegurarme de que tengamos armas para todas esas criaturas.

Sin más salió de la casa, Stiles se preguntó si estaría bien pero considerando que él mismo no se sentía en su mejor momento se alegró de que le diera un tiempo libre.

-Sabemos lo que estas pasando.- habló el otro cazador, tenía la mirada perdida. -Perdimos a nuestro padre hace año y medio.

-¿Cómo lo llevan?- preguntó Stiles de inmediato.

-No ha mejorado mucho, pero si de algo sirve. La venganza no ayuda en nada.

-No quiero dejar que ese idiota se salga con la suya.- admitió Stiles sirviendo tres platos de pasta. -Pero ya no puedo seguir en este mundo sobrenatural esperando que las cosas siempre salgan bien, no podría resistir perder a Parrish.

-¿Es tu pareja?- inquirió Sam un tanto sorprendido y confundido, había presenciado el primer encuentro de su hermano con el chico frente a él, estaba seguro de que había ocurrido un fuerte coqueteo entre ambos que los llevo a la habitación del motel, Sam no había querido ser testigo de eso y rentó otra habitación.

-Ugh no, que horror.- Stiles hizo una mueca. -Parrish estaba enamorado de mi papá, pero mi padre era igual que yo en esas cosas del amor, nunca se dio cuenta, así que Parrish cuida de mi ahora. No tengo a nadie más.

Sam asintió recibiendo el plato que Stiles le extendía, luego entró a la casa Dean, contento de que tenían suficiente material para acabar con las quimeras y los doctores del miedo, se alegró más cuando vio el plato de comida.

-Oh vaya, esta delicioso.- elogió el rubio tras el primer bocado.

-¿Porqué no me hablan de ustedes ahora?- dijo Stiles comiendo junto a los hermanos.

-¿Qué quieres saber?- respondió Dean en un claro tono coqueto que pasó desapercibido para Stiles, Sam comenzó a sentirse incómodo de nuevo.




__________________________________
♡J.

Hello Boys - Stean TW/SPNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora