Un viaje inolvidable [Borrador]

Capitulo 22

Cuando llegamos al departamento, ya eran las cinco y algo.

Diego venía burlándose de Lucas por las tranzas, mientras Lucas soltaba palabrotas.

—Hola, chicos—miramos a Amelia. Estás a su lado tenía unas maletas y nos sonreía.

—Hola... ¿A dónde vas?—pregunté, desconcertada.

Amelie abrió la boca para decir algo, pero escuchamos a Liza llorar my feo. Estaba saliendo de su habitación junto a Rey, su cara estaba muy hinchada y era un desastre de lágrimas.

—Kells, Amelie... Se va—mascullo Liza, llorando más fuerte. Amelie apretó los labios y nos miro con los ojos aguados.

—Lo siento, chicas... Mis vacaciones se acabaron, no puedo faltar, ni aunque quisiera—asentí, y la camine hacía ella, abrazándola.

Liza salto encima de Amelie, que se tambaleo, y la abrazó como si fuera la última vez que lo haría, tal vez era cierto...

—No me dejes... Por favor — sollozó Liza. Amelie comenzó a llorar, mientras la apretaba más contra ella.

—Yo... Lo siento, Liz... Prometo visitarte luego. Te amo mucho, cariño...

—¿Lo prometes?—le preguntó esta, Amelie asintió.

Los chicos se acercaron, y abrazaron Amelie. Si llanto fue más fuerte.

—Los quiero, a todos. Gracias por compartir conmigo y hacerme sentir que soy bienvenida. La verdad es que, desde la muerte de mamá, nadie, aparte de Liza y Kelly, me han tratado con amor o cariño, sin embargo ustedes han sido unos buenos amigos. Los quiero, chicos...

Todos rompimos a llorar, tanto los chicos, como nosotras.

Liza tenía la cara muy hinchada, a Lucas se le deslizaban lágrimas por las mejillas, Rey estaba algo peor, y Diego lloraba como si su propia hermana se fuera.

—Nosotros también te queremos, Amelie, lo digo por todos—exclamó Rey, regalándole una sonrisa.

—Te vamos a extrañar, ojos verdes...— Amelie le dió una sonrisa a Diego.

—Adiós a todos. Los quiero—tomo sus maletas—. Cuida a Liza, Kells. Como siempre.

—Lo hare.

Se despidió una vez más  y salió del apartamento. Rey, Lucas y Diego le habían dicho si podían ayudarla, esta se negó y bajo sin más que decir.

Liza corrió hacía su habitación, mientras lloraba y gemía de tristeza. Rey la siguió, Diego se sento en el sofa y cerró los ojos, y por último Lucas y yo fuimos a mi habitación.

—Pobre Liza, debe estar destruyéndose por dentro—habló Lucas, sentándose en mi cama.

—Si... Más de lo que esta por fuera.

—¿Qué le paso a la mamá de Amelie?
—Preguntó con curiosidad, suspiré.

—Ella... Murio, hace ya mucho tiempo.

—Ya veo...

—Si. Él señor Lambert nunca ha sido tan apegado a Amelie... Bueno, no es que él no quiera... Verás, la mamá de Liza es muy jodida, y más con Amelie. Ella no la quiere cerca ni del señor Lambert, ni  Liza, y siendo sincera, ellos me agradan, pero la mamá de Liza es algo idiota... Solo lo hace porque es hija de otra madre.

—Eso está muy mal, y sobre todo el que está mal es su padre. A mí me importaría una mierda, sigue siendo mi hija, si ella no la quiere que vaya y como ya sabes—asentí.