Mi Amo es un Hombre Lobo

9

Episodio 9 "De novia a mucama"

Melody paso todos sus días restantes pensando en la bestia, sintiendo un vacío cada vez que notaba lo distante que se había puesto Roy, luego de esa noche en la que le hablo sobre su antigua novia, Roy se alejo de ella.

Ella sabía que debería estar feliz por que por fin la bestia no la molestaba y era una buena oportunidad para escapar pero su corazón no dejaba de dolor, y no quería sentirse así por la indiferencia ajena.

Temía que se estuviera enamorando de la bestia.

Su mirada se posó en los hermosos colores de las flores que se encontraba regando.

Distraída en su mundo no se dio cuenta de una presencia a sus espaldas que la observaba con seriedad.

–Veo que no tienes nada que hacer que andar perdiendo el tiempo en unas estúpidas flores que moriran en algún momento.- dijo sunny con su cabello rubio dorado bien enrulado, casi pareciendo una melena de león.

Melody dejo la regadera a un costado y observó a la contraria.

-Ese es mi problema no el tuyo, y no las plantas no se mueren tan fácilmente si las cuidas bien duran mucho tiempo. Si a ti no te gustan las platas es cosa tuya, a mi me encantan.

Sunny la cambia forma gato se masajeo el vestido rojo vino que llevaba con sus manos que portaban unas unas largas de color rojo.

Sin duda el rojo era su color favorito, todo lo que siempre usaba era rojo desde su labial hasta sus tacos.

-Te has vuelto muy altanera por lo visto, niña. Baja de una vez de la nube, o la caída será demasiado para ti.- mencionó de manera malvada mientras comenzaba a caminar de manera lenta alrededor de la humana.

- ¿Qué estas hablando exactamente?  Por que es raro que vengas de la nada a buscarme pelea solo por verme regar unas flores.

La cambiaforma alta se detuvo a un costado de la contraria tomando un mechón del cabello ajeno para sostenerlo entre sus dedos de manera juguetona.

- ¿Cómo lo supiste? Has acertado, no te vine a molestar solo por que te vi tan tranquila en tu mundo. La verdad es que una sirvienta no debería de estar solo regando las plantas, debería de estar haciendo los caseres de sus superioras.- susurró vil con su aliento rosando la oreja de la humana.

Melody enseguida la empujo apartandola de su cuerpo.

-¿Sirvienta?- le preguntó.

Sunny sonrió de manera casi macabra.

-Claro, eso es lo que eres ahora. Roy me informo que desde ahora serás una más del montón de mucamas.

-¿Qué? No eso no puede ser, el no me informo nada. ¿Por qué?

-No hace falta que lo haga ya lo estoy haciendo yo, además solo eres una esclava comprada, lo mínimo que tendrías que hacer es hacer caso sin decir ni mu.- se burló.

La humana bajita la miró con desprecio.

-Eres un ser tan despreciable.

-Oh, mira ya somos dos.- se mofó.- Ahora mejor ponte a limpiarme los tacones con la lengua.- elevó uno de sus pies y acerco su tacón a la contraria.

-Hazlo por ti misma, maldita gata arrastrada.- pronunció con la molestia recorriendo todo su ser.

-¡Humana despreciable!- le gritó con desprecio para lanzarse contra el cuerpo ajeno para comenzar a tirar del cabello de Melody.

-¡Sueltame! Gata regalada, mujer de compañía.- forcejeo tratando de apartar a la descarreada cambiaforma.

-¿Y tú? ¡No eres mejor, solo eres una porquería que se puede descartar fácilmente, una esclava más!