VIII

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- lo. Lo tengo _____ pero. - no sabía que hacer, estaba sumida en una total miseria, en esos momentos se escuchó que alguien tocaba la puerta, caminé hasta abrirla y me encontré con la vieja dueña del edificio.

- señora vea. - dije llamándola.

- tomen sus cosas, ustedes no pagaron el mes. - me contuve, pero tuve unas ganas enormes de golpear el rostro de esa mujer, si le entregaba mi dinero probablemente nos quedaríamos sin comer, además tenía la tarifa del gas, agua y luz, algo estúpido, pero yo estaba consciente de que nos estafaban a ambas.

- tengo el dinero era, vea. - _____ me miró con alivio mientras se sostenía su vientre. - espere un momento. - corrí escaleras arriba para entrar a mi habitación, busqué el viejo calcetín dónde tenía un pequeño rollo de billetes, exactamente todo era para el alquiler, regresé nuevamente dónde estaban ambas mujeres, _____ me miró y le di una pequeña sonrisa.

- y bien? - dijo la mujer mayor.

- tomé...y en verdad lamento todo esto, acabo de llegar y....- la dueña del viejo edificio me interrumpió.

- no me interesan las excusas, permiso. - asentí con la cabeza, la mujer abandonó el edificio y _____ se quedó unos momentos mirándome, evité su mirada, pero me fue imposible, colocó una mano en mi barbilla y me obligó a mirarla.

- No estes triste. - dijo acariciándome, negué con la cabeza mientras sentía un nudo en mi garganta, tenía que buscar algo y sobre todo tenía que decirle la verdad a _____.

- Como no estarlo mujer. - dije separándome de ella. - hay algo que...- el sonido del teléfono llamó nuestra atención, _____ caminó y empezó a llamar, me acerqué a ella quién estaba con el semblante pálido, de pronto cortó la llamada totalmente alterada. - hay tranquila! - dije deteniéndola.

- es Lazarev! - dijo mirándome con angustia. - tuvo un accidente en la escuela Bill...está en el hospital y....- mi corazón se aceleró con fuerza mientras imaginaba lo peor, sin pensarlo dos veces _____ y yo nos fuimos de casa, el hospital estaba lejos y sólo tenía unos cuántos billetes para tomar un taxi, pero no lo suficiente.

- mierda..._____..._____ vete en el taxi y yo me iré caminando. - ella negó repetidas veces. - _____! - le advertí.

- y tú que harás? - dijo mirándome mientras sus ojos estaban cristalinos.

- iré a conseguir dinero. - ella asintió con la cabeza y se fue, en esos momentos, justo cuando ella se fue me eché a llorar, lloré por mi mala suerte y por mi hijo, lloré porque ni siquiera tenía como pagarle el hospital a mi hijo, lloré por no tener dinero ni trabajo y lloré por engañarle a _____, por cometer una locura y por no querer arrepentirme de nada, no me importaba nada en esos momentos, sólo quería que Lazarev se encontrara bien.

Empecé a correr rumbo a la vieja fábrica dónde trabajaba antes, si era posible haría cualquier cosa que mi ex jefe me pidiera, sentía mis lágrimas quedándome y solté un gritó desgarrador, estaba segura que ahora si no tendríamos nada de comer, me había gastado todo el dinero en la renta, llegué a la vieja fábrica y ahí estaba mi ex jefe dando órdenes, de pronto su mirada se encontró con la mía, no era el momento de sentir odio por él, llegué hasta dónde él estaba y hablé con coraje.

- por favor...- dije con la voz más ronca de lo normal mientras quitaba las lágrimas con mi camisa de vestir totalmente sucia. - por favor señor Henry. - hablé nuevamente, por el rabillo del ojo vi como verónica limpiaba sus manos con una franela.

- que haces en este lugar? - dijo mirándome.

- necesito que me devuelva el trabajo. Por favor.! - dije casi rogándole.

- quítame las manos de encima!- habló con asco mientras yo limpiaba mi nariz, sentía mi garganta totalmente seca.- y no te daré nada...lárgate!- habló con voz dura, cerré los ojos con fuerza al mismo tiempo que le estampaba un puñetazo en la boca haciendo que el tipo cayera al suelo, empecé a golpearlo con mis puños, ignorando por completo el dolor de mis nudillos y centrándome en matarlo, odiaba a ese maldito tipo, sentí como las manos de alguien estaban tiritando de mi para separarme y cuándo un sujeto intentó golpearme le di una patada en el estómago sacándole el aire, me separé y al instante escuché como el sujeto les ordenaba golpearme, salí corriendo del lugar, mi destino era llegar al hospital, necesitaba saber cómo estaba mi pequeño y porque _____ se había alterado demasiado, demonios se suponía que _____ no podía tener este tipo de impresiones...

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_____:

- disculpe...disculpe. - pedí a una señora quién era recepcionista del viejo hospital, la mujer me miró con desagrado, casi con asco y la entendía, traía la ropa un poco sucia debido a que estaba limpiando la casa antes de que Billie y la dueña del edificio llegarán.

- que se le ofrece señorita? - dijo quitándose los anteojos con una mueca de irritabilidad.

- mi hijo...vengo por mi hijo. - le di todos los datos y me dio el número de habitación, corrí como un poco de prisa, pero no la suficiente, estaba embarazada y no quería que nada malo me pasara, después de buscar el número llegué hasta su habitación justo en ese momento un doctor iba saliendo de la habitación de mi hijo.

- es su madre? - dijo mirándome y asentí con la cabeza.

- que le pasó doctor? - dije angustiada.

- según la maestra su hijo cayó de una altura aproximadamente de cuatro metros, se rompió su cabeza y en estos momentos esta sedado.- dijo apuntando la cama donde mi pequeño estaba dormido con vendaje en su cabeza.- escuche, su hijo resistió pero le hicimos unos exámenes para descartar algún otro problema y....- en esos momentos la puerta de la habitación se abrió de golpe y una Billie totalmente agitada entró a la habitación, corrió hacía mi ignorando por completo al doctor y miró a nuestro hijo dormido en ese lugar con su semblante más pálido de lo normal y una enorme venda en su cabeza, un brazo fracturado al igual que una pierna, tenía varios raspones en el rostro y en los brazos, unos cuantos moratones y su labio roto.

- cómo está mi hijo doctor. - la voz de Billie estaba más ronca de lo normal, observé su ropa, estaba manchada de tierra, su camisa de vestir color blanco estaba toda estropeada y las tiras de sus pantalones caían de sus brazos.

- me gustaría tratar con ustedes sobre un pequeño problema. - dijo el hombre quitándose sus anteojos, era un sujeto afroamericano.

La Peleadora | Billie Eilish G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora