Capítulo 21: La verdad sale

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Publicado el 2/9/2014, errores tipográficos fijos 25/02/2014

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Esta es una obra de ficción, basada en la serie de libros de J.K. Rowling. Ni reclamo la propiedad ni tengo la intención de hacerlo.

Capítulo veintiuno: sale la verdad

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Sentir que el problema no permitía perder tiempo y que la situación era lo suficientemente grave como para justificar una pequeña flexión de las reglas, los tres fueron inmediatamente al pequeño profesor Flitwick y le contaron sus sospechas. Hermione se había hecho cargo de la explicación real porque, en sus palabras, los maestros tenían más probabilidades de creerla. Flitwick actuó como esperaban y llamó a los Aurors. Ellos también escucharon su teoría, pero tenían muchas preguntas que acompañar. Finalmente, quedaron satisfechos y se fueron para comenzar su propia investigación. Harry, Ron y Hermione se fueron, cada uno con diez puntos para su casa que sentían que no merecían.

Ansiosamente esperaron, pero día tras día pasó, y Malfoy todavía permaneció en Hogwarts. ¿De alguna manera había logrado salir de problemas? Sabían que algo había sucedido. Habían vigilado de cerca a Malfoy, buscando evidencia de algún crimen, y sabían que habían sido vistos al menos una vez. Al Slytherin no parecía importarle mucho, pero también sabía lo que habían hecho.

Hermione había comenzado a dudar de su teoría. Si los Aurors no habían detenido a Malfoy, entonces él tenía que ser inocente, ella había razonado. Ron había estado dividido entre odiar al otro chico y estar de acuerdo con Hermione. Harry, por otro lado, no dudó en su creencia. Para él, Malfoy era un Mortífago. Se consoló con esa simple afirmación, ya que le dio una sensación de logro. Era una parte de su vida tumultuosa que tenía bajo tanto control como podía esperar.

Sus días fueron muy estresantes. Incluso sin la carga adicional de entrenamiento de oclumencia y el misterio de Death Eater Malfoy, deseaba desesperadamente más tiempo en el día. Quidditch había venido, sí, pero tenía que mantenerse al día con su horario de entrenamiento para mantener al equipo alerta. Las lecciones se estaban volviendo más difíciles, las tareas de tarea tomaron más tiempo que nunca y, para colmo, Harry tuvo que lidiar con su decepción por no adquirir el recuerdo del profesor Slughorn, el estrés de esperar a que Dumbledore terminara las correcciones en el puente modificado Summersby-Tsareva; todo eso significaba casi no tener tiempo para mejorar su hechizo defensivo. Había estado a punto de confiar en sus amigos más de una vez. Podrían haber querido unirse a él si lo hubieran sabido, pero se lo había guardado para sí mismo. Una vez que él'd realmente planifica su entrenamiento, les diría, razonó, pero por el momento, solo tenía el poco tiempo que podía robar entre sus otras responsabilidades.

Cuando terminó enero, Hermione devolvió el libro de Smith sobre Mind Arts. Había confiado a sus dos amigos cuánto quería conservarlo por un tiempo más, ya que estaba decidida a aprender Legilimencia también. Desafortunadamente, con Lavender y Parvati demasiado curiosos para dejar libros por ahí, Hermione había sentido mejor volver a examinar el tema una vez que había dominado la oclumencia.

El primer fin de semana de febrero comenzó sorprendentemente cálido. Harry había terminado la sesión de entrenamiento de Quidditch poco antes del mediodía del domingo. Katie se había quejado y amenazado a medias, pero con toda honestidad, cada miembro sabía cuán buenos se habían vuelto. Incluso el rendimiento irregular de Ron había comenzado a mejorar. Después de un almuerzo corto pero saludable, se había encontrado con Hermione. Juntos se habían forzado a pasar la mayor parte de su tarea, Ron se unió a ellos a medias. Fue en momentos como estos que Harry envidió a su amigo. Tener tiempo para descansar parecía ser agradable. ¿Había estado tan relajado alguna vez sobre sus deberes?

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