𝐌𝐲 𝐎𝐡 𝐌𝐲 // 𝐌𝐢𝐬𝐡𝐨 𝐀𝐦𝐨𝐥𝐢

·.·★ CAPÍTULO 13 ★·.·

A la mañana siguiente me desperté muy temprano, me vestí y guarde lo poco que había sacado en mi maleta y luego me dirigí a la habitación de Misho, esta vez si llame a la puerta

- Adelante - me dijo en un tono de voz extraño

Al pasar noté como aún estaba en la cama y lucia bastante pálido

- Creo que he cogido un resfriado por la lluvia - respondió con la voz muy ronca

- ¿Por la lluvia?, no creo - le dije haciéndome la tonta porque era mi culpa que estuviera enfermo ahora

Misho rio dándose cuenta

- Ire por un remedio casero que mi padre tiene, te aseguro que te curará, aunque te advierto que será lo más aberrante que probaras en tu vida - le dije

Baje a la cocina y ahí me encontré con mi padre que estaba preparándose un jugo verde, el solía levantarse bastante temprano para salir a correr

- Buenos días hija, ¿dormiste bien? - me preguntó al verme

- Buenos días pa, si dormí toda la noche - mentí

- Estoy a punto de irme a correr, ¿podrá Mihail quiera acompañarme?, podríamos jugar un poco de basquetbol- me dijo mientras le daba unos tragos a su jugo

- Misho amaneció bastante enfermo, ¿crees que podrías darme un poco de tu remedio? - pregunté

Mi padre me dijo que si y abrió una repisa de donde saco un frasco de vidrio, ahí estaba el remedio que consistía en una mezcla de ajos, cebolla, limón, miel de abeja y algunas otras cosas más, de niña era mi pesadilla.
Me dio un pequeño vaso y me dijo que con eso sería suficiente, yo le agradecí y le dije que ya teníamos que irnos, le mentí acerca de un imprevisto que había surgido.

Subí nuevamente a la habitación en la que estaba Misho y le di el vaso

- Bébelo todo, en unas horas estarás curado - le asegure

Misho se llevo el vaso a la nariz para poder olerlo y al hacerlo dio una arcada

- Esto huele a mierda - dijo quejándose

- No seas llorón y tómatelo ya - le dije mientras me acercaba a él y le quitaba el vaso de la mano para luego dárselo yo misma en la boca

- Abre grande- fue lo último que le dije antes de hacer que se lo bebiera todo casi a la fuerza, del pequeño forcejeo resultó que caí encima de él, mientras estaba tirada sobre el me permiti observar el hermoso azul de sus ojos, eran muy lindos, eran como un cielo o un mar muy claro, luego de unos segundos así reaccione y me levante rápidamente

- Prepara tu maleta, te espero abajo en 5 minutos- le dije mientras salía por la puerta y me dirigía hacia abajo

Mientras estaba esperando a Misho le pedí a papá que me disculpara con mi madre por no despedirme, ella aún no se despertaba y estaba segura de que si yo iba a despertarla para avisarle que ya me iba se enojaría más, papá me dijo que quizá podría ir a visitarme en unas semanas mientras mi madre se iba de viaje con sus amigas, yo acepté gustosa.

- Nos vemos luego señor, fue un gran gusto conocerlo - se despidió Misho luego de que mi padre nos llevara al aeropuerto

- El gusto fue mio Mihail, cuida a mi hija y por favor también cuídate tu - me dijo mi padre para luego darle un fuerte abrazo.