𝐼𝑀𝑃𝑅𝑂𝑁𝑇𝐴 ᪥ 𝐽𝐴𝐶𝑂𝐵 𝐵𝐿𝐴𝐶𝐾 ᪥

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚄𝚗𝚘

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-Si papá no te preocupes, estaré bien ¿Sí?- la suave risa de la joven Swan resonó en todo el vehículo.

-Quiero que me llames al menos una vez al día- el suspiro de su padre se escuchó a través del teléfono- Y si deseas volver Sasha, por favor no dudes en decírmelo-

Sasha no pudo evitar sonreír ante las palabras de su padre.

-Tranquilo papá, si me arrepiento créeme que no dudaré en llamarte- le aseguro su hija mientras miraba a través de la ventana del coche.- Ya estoy llegando a la casa de mi padrino, te llamo en la noche ¿Sí?-

-De acuerdo pequeña, te amo hija- se despidió su padre.

-También te amo papá-

Sasha soltó un suspiro cuando corto la llamada, si había algo que no se le diera bien a la joven Swan, era mentir. Y vaya que había sido muy difícil haberle mentido a su padre.

Sasha Swan se encontraba en camino gracias a una llamada que su padrino le había hecho, la angustia había sido notable en la voz de su padrino, preocupado por la situación en la que se encontraba su prima Isabella. 

Su padrino no le contó mucho, solamente la historia por arriba de como su hija había estado saliendo por un largo tiempo con un muchacho, el cual este le había roto el corazón a su hija. Por lo cual ahora Isabella se encontraba pasando una muy fea depresión debido al dolor que sentía en su corazón. 

Charlie creyó que sería una buena idea que su ahijada viniera a su hogar una temporada, tal vez eso animaría un poco a su hija, ya que él no sabía como lidiar mucho con la situación. 

Pero al menos Charlie trataba de dar todo de sí por ayudar a su hija. Para Sasha, ella no podía negarse ante tal pedido de su padrino, no solo por él, sino que por su prima. Si había alguien que supiera lo que es llevar un corazón destrozado, esa era ella. 

Pues tan solo a los dieciséis años de Sasha, la chica cargaba con un reciente corazón roto de una relación de dos años y medio.  Sasha había entrado en una fuerte depresión por la reciente ruptura.

Lo más feo de la situación, era que su ahora exnovio no había roto con ella. Claramente, Sasha le había puesto el pretexto a su padre que sería mejor que ella se fuera de California una temporada, luego de pasar casi medio año tratando de sobrellevar su dolor. 

Su padre había notado que en cierta parte el ánimo de su única hija, de cierta manera, había mejorado un poco, por lo que creyó que sería buena idea que su primogénita pasara una temporada lejos de California.

Sasha sabía que si ella le decía a su padre que iría a Forks para ayudar a su prima a salir de la depresión de una ruptura, este no la dejaría. 

De seguro, Clark creería que eso solo empeoraría el estado de su hija y el hombre quería todo lo contrario para ella. Clark tenía la misma idea que su hermano Charlie, de seguro la compañía de Isabella, un nuevo ambiente y nuevos amigos le harían bien a su pequeña hija.

La joven Swan bajo del taxi, una vez este llego al destino marcado por ella, luego de pagarle al taxista y tomar sus dos maletas, Sasha se dirigió a la puerta de la vieja casa frente a ella, golpeando con su nudillo tres veces.

Quien la recibió fue únicamente su padrino, que al ver a su ahijada frente a él no dudo en envolver sus brazos al rededor de ella, acogiéndola en un fuerte y cálido abrazo.

-También me alegro de verte tío- hablo ella aún en el abrazo de su padrino.

-No sabes lo mucho que agradezco tu ayuda Sasha- le comento el mientras dejaba un beso en la cabeza de su ahijada antes de separarse

-Déjame ayudarte con tus maletas, vamos, entra estas en tu casa- Sasha sonrió ante las palabras de su tío, pasándole una de las maletas, ambos entraron al interior de esta dirigiéndose escaleras arriba. 

-Bella no se encuentra en la casa, salió con un viejo amigo, pero te aseguro que no demorara en llegar- contaba el hombre antes de pararse frente a una puerta blanca- Sabes que no suelo recibir muchas visitas, pero si hay algo que siempre quedo intacto es tu habitación- comento su tío con una sonrisa en su rostro antes de abrir la puerta. 

Sasha no pudo evitar que una enorme sonrisa pareciera en su rostro al ver que su vieja habitación estaba intacta. Las paredes mantenían ese color beige y blanco, cerca de una de las ventanas se encontraba la vieja cama de Palets que ella y su tío habían armado una vez. Y sobre todo aquel enorme ventanal con cojines que daba directo al bosque. 

-En lo que te quedas aquí puedes cambiarla y volverla a decorar. Sé que de seguro ya no juegas más con tus viejas muñecas y peluches. Pero no he querido mover nada desde la última vez que viniste de vacaciones. En parte las muñecas dan un poco de miedo ¿No crees?- Charlie dejo la maleta sobre la cama. 

Sasha negó divertida con su cabeza al ver la repisa cerca de su armario, esta estaba llena de viejas muñecas, la mayoría de porcelana y algún que otro peluche suyo bien acomodado. 

-Ahora que las miro un poco si dan miedo- Sasha bromeo, ella sabía que sí había algo que a su tío asustara. Eran las muñecas de porcelana.

 -No sé cómo podías jugar con eso cuando eras niña- este suspiro mirando a las muñecas con una mueca en su rostro.

 -Tal vez ocupe la estantería para mis libros- menciono ella mientras tomaba una de sus viejas muñeca entre sus manos. 

-Creo que eso es una mejor idea- concordó su tío estando de acuerdo con ella.

 -¿Aún conservas mi vieja guitarra?- Sasha sonrió más al ver su antigua guitarra apoyada sobre aquel columpio. 

-Como he dicho antes, Sasha. Todo está tal cual tú lo dejaste la última vez. Claro que hice un poco de limpieza, pero demás las cosas siguen estando en su lugar.- Charlie no pudo evitar sonreír ante la notoria emoción de su ahijada. 

Si había algo que le alegrara el corazón al viejo hombre, era Isabella y Sasha. No había algo que lo hiciera más feliz que tener a su hija y ahijada en su hogar, alegrándole los días al solitario hombre.

 -¿Cómo estás tú?- le pregunto Sasha mientras dejaba la muñeca de nuevo en el estante.

 -¿Yo?, bien. Bueno, eso creo.- su tío suspiro mientras se apoyaba en la pared- La situación con Bella es algo difícil y complicada. Ya sabes, un corazón roto, Bella quiere mucho a Edward y la ruptura la está matando.- Sasha sintió que a medida que su tío hablaba su corazón se estrujaba, con cada palabra que él decía se notaba cada vez más el dolor que este cargaba

-Trato de ayudarla en todo lo que puedo, pero siento que eso no es suficiente, trate de razonar con ella para que volviera con su madre, pero eso pareció empeorar la situación- Charlie disimuladamente se limpió una lágrima que corría por su mejilla- Creí que tal vez con tú presencia Bella pudiera mejorar, ya sabes cuanto ella te adora Sasha-

 El corazón de la joven Swan se estrujó en su pecho al escuchar las palabras tan dolidas que salían de la boca de su tío, Sasha jamás imagino que su padrino estuviera tan mal por lo que estaba pasando su hija. 

Incluso ella misma pensó si su padre también se sentiría de esa manera, Sasha creía que si a Charlie le dolía ver el estado en el que su hija se encontraba de seguro a su padre también se encontraba igual que él o peor por ella. La joven Swan se acercó a su tío y no dudo en abrazarlo.

 -Trataré de ayudar a Bella en todo lo que pueda- le prometió ella. Charlie solo suspiro, sintiéndose aliviado de por fin decirla alguien como se sentía él respecto al estado y salud mental de su hija.