・~←★𝐂𝐈𝐍𝐂𝐎★→~・

2.4K 203 208
                                    

Luego de que Minho se fue, Jisung se quedó otro rato con sus padres y viendo su teléfono en el sillón. Se despidió de sus padres y le dio un beso a Doongie, para luego subir a su habitación. Se recostó un momento en su cama. Estaba procesando todo lo que había pasado esa tarde, todo lo que sintió estando con Minho. Cada momento se sintió especial, como si fueran amigos desde hace años. La forma en la que le hablaba, tan amable y feliz, simplemente le encantaba. Como siempre hacía buenos chistes y solo con el hecho de hacer muecas ya hacía que él se riera a carcajadas, Minho tenía una personalidad tan explosiva y llamativa, que solo hacía que quisiera estar con él todo el día. Luego... recordó como Minho le agarró la cintura y no pudo evitar que sus pensamientos tuvieran un cambio drástico.

Empezó a recordar las lindas manos de Minho apretando su cintura y la rica sensación de Minho apretándole el trasero, quería tenerlo cerca, quería tocarlo y sentir sus labios.

Rápidamente se puso de píe y cerró la puerta de su habitación con candado. Regresó a su cama y se quitó los zapatos. Luego se sentó en la cama con la espalda apoyada en la pared y sus piernas estiradas.

Empezó a meter sus manos bajo su camisa, imaginando que era Minho el que lo hacía, con sus fuertes manos quitando la tela, lentamente se quitó toda la camisa y se empezó a acariciar el estómago, era un punto erógeno para él, se imaginó a Minho lamiendo cada parte de su estómago y cuello, dándole besos, pequeñas mordidas y dejando marcas posesivas por donde fuera. Sólo así, logró tener una gran erección bajo su pantalón, la cual necesitaba aliviar.

Sin mas vueltas empezó a desabotonar su pantalón, imaginando a Minho bajando con su lengua hasta tocar la tela del jean y siendo este el que se lo desabrochara con esas preciosas manos. Ya con el pantalón en el suelo, empezó a masajear su erección suavemente, sobre la tela del bóxer, sintiendo como cada vez se hacía mas grande su erección y el deseo de tener sexo con el mayor.

Necesitaba tener el pene de Minho, quería chuparlo todo y que Minho gimiera su nombre, mientras le acariciaba el cabello y se venía en su boca, quería comerse su semen, tragar cada gota que saliera del mayor, demostrándole que era la cosa más exquisita para él. Entre todos estos pensamientos, terminó con el bóxer en las rodillas y su mano derecha rodeando toda la base de su pene, con la mano izquierda sacó una botellita de lubricante de la mesa de noche y la aplico sobre la palma de su mano, para empezar a masturbarse.

Inicio con movimientos lentos que subían y bajaban por toda su extensión. Luego llegaron los pensamientos de Minho, de que fuera su boca, quería sentir esa caliente lengua lamiendo cada parte de su pene, tomando la punta entre sus labios, hasta dejarlo entrar y que chocara con su garganta. Su mano subía y bajaba rápidamente, hasta chocar con la piel de su abdomen bajo, generando un sensual chasquido, pero no era suficiente, quería que ese fuera el sonido de su piel chocando contra la piel de Minho, quería que ese fuera el sonido de Minho follandoselo.

Duró varios minutos así, con su mano subiendo y bajando rápidamente por toda la extensión de su pene, mientras pensaba en Minho, en su sexy voz y en lo sexy que era en todo aspecto, en lo deliciosa que se vería su boca lamiendo todo su pene y lo rico que seria que Minho lo besara, con la respiración agitada y aun con rastros de su semen en los labios, demostrándole el buen trabajo que había hecho.

Quería soltar toda su esencia dentro de la boca del mayor, que sacara su pene de él y todo el líquido escurriera desde su lengua, hasta salir por la comisura de sus labios.

Desde hace rato los gemidos amenazaban con salir de su boca, quería gritar el nombre de Minho y lo bien que se sentían cada una de las cosas que imaginaba que el mayor le hacia, pero no podía, tenía que ser silencioso si no quería que sus padres y todo el vecindario se enteraran de lo que estaba pasando en su habitación.

𝙀𝙉𝙏𝙍𝙀 𝙉𝙊𝙎𝙊𝙏𝙍𝙊𝙎-𝗠𝗜𝗡𝗦𝗨𝗡𝗚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora