¡¿Quien es la rubia?!

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Alex no pudo resistir más el probar los labios de Piper, además que era la única forma de silenciarla. Los brazos de Piper rodearon su cuello acercándola más. Las manos de Alex empezaron a explorar más allá de lo debido, para sorpresa de la rubia los labios de Alex se alejaron de ella.


—Mierda, Pipes, perdóname. Alex salió de la ducha dejando a Piper confundida.

Alex entro en su habitación directo al baño, se despojó de sus ropas mojadas, maldiciendo, regañándose.

—Pero que idiota, ¿porque la bese? ¿Por qué? joder, prácticamente me aproveche de ella; bien echo Alex, tomando ventaja de una chica ebria. Dejo correr el agua que caía sobre su cabeza. —Dios, ahora Pipes va a pensar lo peor de mí, como la voy a ver mañana a la cara. Salió de la ducha envuelta en una bata. Se toco lo labios recordando los labios de la rubia, una sonrisa apareció en su rostro.

—Pipes es hermosa, y aún más ebria, tengo que hablar con ella, si, tengo que disculparme, decirle..., joder que le voy a decir, que no aguante las ganas de besarla, mierda que hago...


En esos momentos Piper ya con la cabeza algo despejada daba vueltas por la habitación, aun no lograba entender que había pasado, porque Alex la había besado para después salir así.

—Quizás no le gustaste Piper. Se dijo en voz alta. —Si, es lo más seguro, joder y yo como una idiota creyendo que le gustaba, ha de estar pensando lo peor de mí, vez porque no debes tomar, ahí andas de ofrecidota, y luego, abriendo tu bocota; prácticamente le confesaste que te gusta, le dijiste que era hermosa. Se llevo la mano a la frente. —Y ahora como la vere mañana, ¡joder!......


—Amor, ven a la cama, ¿Qué tanto haces? Nicky palmeaba la cama apresurando a Lorna. Escucho música, estaba por salir de la cama, pero se quedó con la boca abierta al ver a Lorna. —¡Mi amor!... Aplaudió lamiéndose los labios.

—Creíste que me olvide de tu regalo. Lorna estaba parada en el marco de la puerta vistiendo un diminuto baby doll de encaje negro. —¿Te gusta?

—¡Dios! ¡Me encanta! Ven que quiero quitártelo muy despacio. Lorna camino muy sensual, se subió a la cama gateando con una sonrisa coqueta, Nicky empezó a desvestirse, estaba por eliminar su ropa interior cuando su teléfono empezó a sonar. Lorna rodo los ojos.

—¡Ni se te ocurra contestar! Tan pronto termino la frase, su teléfono empezó a vibrar. Ambas se vieron, tomaron sus teléfonos viendo quien llamaba.

—Es Piper. Dijo Lorna

—Es Vause. Dijo Nicky

Sin esperar más ambas contestaron

Lorna.- Piper...

Nicky.- Vause...


Piper.- Lorna, perdón si te llamo pero es que..

Lorna.- ¿paso algo?

Piper.- Paso que Alex me beso


Nicky.- ¿Qué? ¿en serio? Esa es mi chica.

Alex.-Por dios Nicky, como me dices eso, estaba ebria, yo..

Nicky.- Haber, escúchame, es solo un beso, ¿o es que acaso la viste como caperucita y te la querías comer?


Un Romance InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora