Sabía que debía decir que no a la noche de makchang. Pero no lo hice. El tío se veía tan contento cuando le conté que saldría con amigos que me negué a decepcionarlo.
Y ahora soy yo quien sufre.
Dijeron que iríamos a una fiesta.
Algo tranquilo.
Un montón de adolescentes hormonales, bebiendo alcohol, no es "algo tranquilo".
Igualmente acepté.
Tenía que.
Me centro de nuevo en la conversación, feliz de que no me hagan parte de ella, solo mi presencia basta para que estén felices.
Querían que me incorporase.
Que formara parte de algo y eso estoy haciendo.
Pasaron de hablar de deportes y música a familia y planes futuros. Oh, que sorpresa. No tengo ninguno de los dos. Por lo que aprovecho este momento para desaparecer.
—Chicos iré al baño un segundo.
Asienten y me dan sonrisas a juego. Estoy completamente seguro de que ni siquiera escucharon lo que dije, pero no me interesa.
Camino rápido entre todas las personas que bailan y se divierten, intentando no quedar atrapado entre varios cuerpos.
No tengo ni la menor idea de donde estoy o hacia donde voy pero cuando veo una puerta corredora al final de un pasillo me dirijo a ella. Da a un pequeño balcón en el que solo se ve un extenso campo. Esta casa está lejos de la ciudad por lo que las vistas son impresionantes y sin contaminación lumínica.
Dejo escapar un suspiro de alivio al ver que no hay personas aquí.
Pero mi felicidad no dura mucho tiempo, una voz ronca susurra a mis espaldas.
—¿Ahora quién persigue a quien?
Me sobresalto, mi corazón comienza a latir a una velocidad inhumana. No me gusta que me sorprendan de esa forma pero intento camuflarlo. Demasiado acostumbrado a ocultar lo que siento para que no lo usen en mi contra.
Giro sobre mis pies y lo veo aparecer de detrás de una columna, estaba oculto en la oscuridad. Por eso no pude verlo con mi barrido superficial.
Jeon Jungkook.
Mi eterna pesadilla.
Desapareció mucho antes que yo y, siendo sincero, pensé que se habría marchado a su casa o que estaría engatusando a alguien más.
Realmente sería un beneficio que se olvide de mí.
Ser gay o bi o cualquier cosa que no sea heterosexual es un problema. Pero en Corea… es un crimen. Te lleva al rechazo social, te convierte en un paria.
Las cosas que me dijo, la forma en que las dijo, sé que son reales. Sé que siente algo por mí. Pero no tengo ni la menor idea de qué es.
Siendo sincero es un hombre atractivo, la clase de atractivo que crea problemas y no quiero más de esos en mi vida.
Por lo que mantenerse alejado sería la opción correcta, pero no puedes pedirle a alguien que ha tenido sed toda su vida que rechace a la primera persona que le ofrezca agua.
Él me observa fijamente, pareciendo sorprendido por mi presencia.
—Este piso está fuera de los limites, Jimin-shi.
Jimin-shi.
Me gusta la forma en la que dice mi nombre.
Nunca nadie me había llamado así.
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Lost Boy (KOOKMIN)
Любовные романыÉrase una vez, había un castillo mágico donde todo se marchitaba, incluyendo el corazón del príncipe. Todos desean vivir una historia de cuento de hadas. La mía inicia con un reino destrozado. Con una tragedia que lo consumió todo. Un rey caído y un...