Una semana sin martes

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Sí me tocara hablar sobre un espacio sin el planeta martes, no sabría decir ni una palabra pero, una semana sin el martes es jodidamente molesta y no hablo de cualquier semana, sino de la única semana que tenía con Ella.

El martes en la mañana Ella respondió mi mensaje.
Si llegas a borrar esos mensajes te mato. Me reclamó
Buenos días , aún estoy en la cama, anoche cuando escribiste ya estaba dormida pero aunque no abrí el chat , alcancé a leer algo desde las notificaciones ,porque me despertaste. No te sé explicar lo que sentí pero, ya era tarde para responder.
Amy, yo también siento muchas cosas.
Leí esos mensajes y no supe que decir. Todo se dio tan bien ayer en mi casa, que para mí es algo increíble. Eres tú, Amy. Antes me gustaban todas las mujeres y ahora sólo eres tú y me impresiona la idea de tener a una mujer esperándome y que aquí sólo me importes tú. No le encuentro lógica porque yo venía con otra idea pero te vi y no se que pasó , ese beso me supo a poco, quiero más , mucho más .

A mí también me supo a poco ese beso pero, ese martes me supo a nada , ese maldito martes , estuvo vacío.
Ella se pasaría el día en casa de su abuela y no podría verla. Nos pasamos buen rato hablando por teléfono pero , para mí no era suficiente , yo quería verla, la quería cerca de mí. En una ocasión me dijo que le pediría el carro a su padre para venir a verme pero no lo hizo , me quedé esperándola toda la tarde, anciosa y nunca llegó. Pasado un buen rato me explicó que no había podido y que nos tocaría esperar al miércoles para vernos. Para mí era mucho tiempo pero, no me quedaba de otra.

Me encontraba sola en mi casa ( por suerte ) cuando ella me dijo que estaba cerca y que pasaría a verme. Ya eran al rededor de las 10:00 am cuando Jennifer me escribió para decirme que Ella había pasado por su casa y que había llegado a saludar, algo que no me molestó en lo absoluto porque yo misma le aconsejé que lo hiciera y no por Jennifer , sino por su madre, que es una mujer muy buena y lo hallé correcto, en honor a el tiempo que fue su suegra y las cosas por las que pasaron en aquel momento. A unos pocos minutos llegó mi suegro << Vaya momento tan inoportuno >> pero por suerte se marchó rápido después de encontrar lo que sea que venía buscando.
Cuando lo acompañé hasta la puerta y él se alejó en su carro, me voltié hacia mi izquierda y ahí estaba... Ella venía caminando por la calle con su amigo Carlos y la novia de este. No pude evitar sonreír cuando la vi y ella me devolvió la sonrisa. A penas se acercó a mí, la abracé fuerte , ni siquiera recordé que estaba en el portal de mi casa o bueno, de la casa de mi novio , porque aunque yo viviera con él , no era mi casa.
Ella venía sudando de calor y los hice pasar , no recuerdo si saludé a los chicos ,supongo que por educación lo hice pero, mi atención estaba puesta en ella , que a penas entró hasta mi cocina por un vaso con agua , nos besamos, justo antes de envolverme en sus brazos de nuevo , dejando mi nariz pegada a su cuello , percibiendo su olor ( nunca lo olvidaré ). Ella se sentó en unos de mis muebles y me hizo un gesto para que me sentara en su regazo, yo lo hice y una vez sentada en sus piernas, no quería pararme de ahí , a pesar de estar más nerviosa que nunca. Ella pasaba las manos por mis muslos, acariciándolos mientras yo la besaba en los labios. Sus amigos no podían vernos porque se quedaron esperando en uno de los muebles de la sala. Nosotras aprovechamos para entrar a mi cuarto.
No me lo podía creer pero tenía a la chica que siempre quice acostada en la cama donde dormía con mi novio, lejos de sentirme orgullosa por eso , estaba tan nerviosa que no sabía que hacer o que decir y ella lo notó. Me senté junto a ella en la cama y me di cuenta que yo no era la única con los nervios de punta, ella nisiquiera se atrevía a mirame a la cara , en varias ocasiones, tuve que tomarla del mentón para que lo hiciera y logré que no solo me mirara a los ojos , sino que también me besara en los labios. Los besos se volvieron tan intensos que terminó tumbada ensima de mí , haciéndome caer de espaldas a la cama, comenzó q deslizar su mano por mi pecho hasta adentrarse en mi blusa , tocando toda mi piel, luego dejó de besarme en los labios para recorrer mi cuello , mis cláusulas y después , poco a poco comenzó a besarme entre mis tetas , justamente en la guitarra que tengo tatuada...en su honor.
Yo estaba perpleja, no podía creer que estaba besando mi tatuaje, ese tatuaje que me hice por ella hace unos meses.

Ella es mi guitarra.

Con ese apodo la conocí hace años, así le decía Carlos y así se me quedó grabada en la mente y en el corazón.

Luego me viró de espaldas a ella quedando boca abajo en la cama y comenzó a besarme la espalda baja hasta bajarme el short a mediados de mis nalgas , besando todo lo que quedaba descubierto. Yo parecía sentir esos besos como descargas eléctricas por todo mi cuerpo pero...no pasó mucho más que eso porque sentimos la puerta principal sonar y nos paramos de golpe, asustadas. Pensé que había sido mi novio pero no , había sido Carlos y juraría que fue a propósito para que ella se apurara. Después de semejante susto no volvimos a retomar por donde nos habíamos quedado y salimos del cuarto , agitadas y sin ganas de despedirnos. Carlos se adelantó con su novia y nos dejó solas en la sala para despedirnos a gusto y ...juraría que ese momento fue uno de los más difíciles que había vivido con ella y aún más cuando , antes de irse me dijo TE AMO, mirándome a los ojos , algo que nisiquiera yo me había atrevido a decir pero, fue tan creíble que mi alma se abrió por completo diciéndole el TE AMO más sincero que he dicho.
Había esperado ese momento por años .

Me lamenté de no haber terminado lo que empesamos cuando vi que ya caía la noche y mi novio no había llegado pero... Como diría mi abuela: Para adivino , Dios.
No puedo dejar de pensar en aquel mensaje que me escribió al rato de irse de mi casa...

Nos revolvimos todo, Amy. Todo, mi amor , nos revolvimos la vida. Es lindo y triste a la vez. No podía ni mirarte a los ojos , es ese miedo que no había sentido antes. Me has mezclado todo. Te quiero como mi mujer , te quiero...te amo.

Mi novio llegó y yo estaba insoportable con él, no se lo merecía pero yo no tenía cabeza para otra cosa q no fuera ella , así que discutimos por cualquier motivo y él se volvió a ir ,dejándome sola. No perdí tiempo en escribirle a ella para preguntarle si podía ir a su casa , a verla y obviamente me dijo que sí.
Llamé a mi amiga Laiz, que siempre ha estado conmigo para las que sea y le pedí que me acompañara.

Estando fuera de su casa, no podía sostenerme en pie , me temblaba hasta la respiración. Laiz se reía de mí y me decía... Que lindo es el amor !!! Me daban ganas de matarla por burlarse así de mis nervios y cuando ya estaba a punto de morderme las uñas , Ella salió de su casa. Hacía unas cuantas horas que la había visto pero, para mí ,no la veía desde hace algunos años. Nos alejamos de su casa , acompañadas de Laiz y de Samuel , el chico que también estaba con ella el primer día que llegó .
Nos sentamos en una acera y le conté todo lo que me pasaba desde que ella regresó. Laiz y Samuel se sentaron lejos de nosotras para darnos privacidad.
Yo estaba tan mal que hasta un par de lágrimas rodaron por mis mejillas cuando ella ( con toda razón ) me dijo que lo nuestro no podía ser ahora, que había que pensar con la cabeza fría. Eso ya yo lo sabía pero necesitaba escucharlo de se voz para tranquilizarme.

Amy, ahora es imposible , sería una brutalidad de ambas , dejar las vida que tenemos y juntarnos porque yo ahora no te puedo ofrecer lo que necesitas tú y tu hijo. Yo tengo que volverme a ir , planear bien las cosas para que todo se de bien en un futuro, mientras has las cosas bien , no te dejes llevar por un impulso como hace unos meses, no lo dejes ahora. Te prefiero con él, a que estés sola en la calle y yo tengo que regresar con ella porque es la única persona que tengo allá. Ya veremos que hacemos con esto que sentimos las dos. Amy, ya no estás sola con este sentimiento , estamos juntas en esto. Yo también siento muchas cosas por ti desde que te vi .

Tras escuchar esas palabras , regresé a mi casa mucho más tranquila, después de fumarme par de cigarrillos con ella y basarnos como adolescentes en la oscuridad para que nadie nos viera.
No quería despedirme pero tenía la esperanza de volverla a ver antes de que se fuera y que esa semana sólo fuera UNA SEMANA SIN MARTES.

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