Doctor

188 23 36
                                    

Nuevamente se encontraba en el ambiente de hospital del día a día de su vida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nuevamente se encontraba en el ambiente de hospital del día a día de su vida.
No era nada especialmente magistral, ni algo fuera de lo común... maquinaria sonaba de vez en cuando, doctores, médicos y enfermeros caminaban de un lado a otro, llamando a gritos a sus pacientes o tan solo buscando sus puestos de trabajo... algunos incluso buscando herramientas como tijeras o engrapadoras que solían viajar de oficina a oficina sin descanso... Dios sabe cuántas lapiceras Argentina debía haber perdido ya por ese hecho.
Mucha gente enferma tocia o estornudaba, pero por suerte parecía ser un día tranquilo, nadie lloraba ni se retorcía en dolor.

Aunque claro que no lo diría en voz alta, no... no había mayor maldición en el mundo que decir "Que día tranquilo" en un hospital...
Al segundo que lo dijera, seguro se caía un avión y habrían ocho accidentes de tráfico.

- Doctor - Llamó una voz amable mientras le tocaba la puerta

Argentina se giró a ver a Perú con una buena sonrisa... claro que jamás se escaparía de los ojos burlones del peruano, el enfermero se apoyaba contra el marco de la puerta como si reinara el lugar.

- Decime - Le pidió mientras organizaba algunos papeles, así poder atender a su próximo paciente de manera decente y no en el desorden que siempre era su sala...

- Canadá está enfermo, espero no te moleste cubrirlo por hoy - Le explicó Perú brevemente

Argentina chasqueó la lengua, mirando al enfermero con desaprobación.

- Que curioso que siempre esté enfermo cuando el hermano lo quiere llevar a jodas ¿No? - Respondió con amargura... su compañero siempre había sido un irresponsables

El peruano rió en respuesta.

- ¿Que quieres que haga? Es doctor, se puede firmar sus propios justificantes - Dijo simplista, poniendo los ojos en blanco - Ey, al menos agradece que está vez te pusieron a cubrir a alguien que tiene su oficina al lado de la tuya, y no con tres pisos de diferencia, como la última vez - Bromeó

- ¡Ay, no! Que desastre ese día, me tuvieron que esperar horas para que los atienda - El argentino por su parte no reía, recordaba con horror ese día maldito - No sé porqué siempre me escojen a mí para cubrirlos, como si no tuviera mis propios pacientes... -

- Tienes talento - Perú se encogió de hombros

- No, solo saben que nunca me voy a negar a lo que dicen - Contradijo el contrario, levantando una ceja

- Tienes talento para seguir ordenes - Corrigió el primero, sonriéndole burlón una vez más

Argentina pudo encontrar en su corazón un espacio para reír, a pesar de la injusticia de la situación... de cualquier manera no dejaría pacientes sin atender solo por compañeros irresponsables.

De la A a la Z  (MexVeneArg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora