Ambos nos adentramos en la cama cubriéndonos hasta la mitad con la sábana. Giré mi cuerpo en su dirección y por un momento me permití contemplar su rostro que estaba fijo en el techo. Luego al notar un pequeño movimiento de su parte cerré abruptamente mis párpados temiendo ser descubierto.
Después de un rato, al no sentir ninguna otra acción por su parte, abrí mis ojos con lentitud encontrándome con un par de ojos marrones mirándome junto a una media sonrisa. Le devolví la mirada algo avergonzado por haber sido descubierto.
Él no dijo nada, solo me miró fijamente logrando una aceleración de mis latidos. No sabía cómo sentirme hacia esto. Mi corazón latía con frenesí y para él parecía lo más normal del mundo. No es que me pareciera raro o incómodo mirarlo, no, de hecho me gustaba, es solo que no entendía por qué mi corazón latía tan desesperadamente a causa de él.
—"Será mejor que durmamos"—dijo él llevando una mano hacia mi cabello, acariciando y revolviendo mis mechones para luego mantenerla ahí, dejando pequeñas caricias al mover su dedo pulgar sobre mi cabello—
Asentí levemente y disimuladamente me acerqué un poco más a él dejándome envolver por la calidez a mi lado.
Él continuó mirándome y dejó de acariciar mi cabello para acercarse más a mí. Mí corazón dio un vuelco cuando sentí su aliento chocar contra mis labios. Contuve la respiración instintivamente por un momento.
Incliné un poco mi cabeza hacia arriba para mirarlo, reduciendo el espacio entre ambos por accidente. Nuestras miradas se entrelazaban y mí corazón se sentía desfallecer. Los latidos de este estaban taladrando mí cabeza. No sabía si esto era correcto o no pero simplemente me dejé llevar por el momento y por todo lo que él me estaba transmitiendo. No quería alejarme, su cercanía era algo que no me molestaba.
—"¿Puedo abrazarte?" —me susurró él a los segundos—
Yo lo miré algo confundido y justo cuando iba a responderle, él volvió a hablar.
—"Suelo dormir abrazado de alguien. Pero sí te incómoda no importa, puedo abrazar la almohada" —exclamó él algo rápido dejándome atónito—
Al ver que no obtenía respuesta de mi parte negó con la cabeza y habló de nuevo sin darme oportunidad a objetar nada.
—"Sí, perdón, qué tontería" —espetó, y justo cuando estaba dándose la vuelta conseguí salir de mi ensimismamiento, tomé su muñeca tirando de su cuerpo hacía mí y lo rodeé con mis brazos haciendo que, en el proceso, su cabeza quedara apoyada contra mi pecho—
—"No dije que me molestara abrazarte, idiota. No me dejaste hablar" —repliqué y a pesar de haberlo insultado sabía que él estaba sonriendo—
Él simplemente se acomodó en mis brazos y rodeó mí cintura, luego yo apoyé deliberadamente mi mentón sobre su cabeza.
Llevé una de mis manos hacía su cabello, dejando leves caricias, al igual que él había hecho antes conmigo.
—"Descansa" —exclamé luego de un rato—
Él carraspeó en forma de asentimiento. Y yo seguí acariciando su cabello, con una sonrisa que se había implantado inevitablemente en mi rostro.
—"Oye, puedo preguntarte algo?" —cuestionó de repente él—
—"Claro" —respondí al instante, curioso por lo que quisiera preguntarme—
Él retiró su cabeza de mi pecho y la niveló con la mía por un instante para observarme. Lo miré haciéndole saber que podía preguntar lo que fuera.
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¿Más que amigos? (winnysatang)
RomanceDonde ambos están demasiado ciegos como para ver que el cariño que se tienen no es sólo de amigos. ¿Se darán cuenta de lo que realmente sienten algún día? Todos los derechos reservados ©