TÚ - Daemon Targaryen / Aegon Targaryen II

5

Ya habíamos terminado de comer. El rey se levantó dando a entender que debíamos retirarnos.

Cuando estaba por dirigirme hacia Daemon, Alicent me tomó del brazo haciendo que vayamos a nose donde.

Cuando vi a Daemon este solo contuvo la risa.

Llegamos a una de las habitaciones que según escuché la familia real habitaba en ese largo pasillo.

Un guardia estaba custodiando las puertas de la habitación.

—La reina Alicent.— habló mientras abría la puerta.—

—Te presento a mis hijos.— señaló—.El es Aegon y tiene 4 onomásticos pronto será su 5 onomástico, Helaena tiene 3 onomásticos y Aemond tiene 2 onomásticos.

Aegon jugaba con sus juguetes de dragón tallados en madera. Mientras que los más pequeños estaban siendo cargados por las doncellas.

Me agaché quedando a su altura de Aegon.

—Hola pequeño Aegon.

Me alcanzó su dragón de juguete.

Lo tome y empecé a jugar con el, mientras que el se reía.

Alicent se fue donde estába una de las doncellas, agarró a Aemond.

Aegon fue a traer otro de sus juguetes, mientras yo me paraba e iba hacia los más pequeños.

—Hola pequeña Helaena.— la agarre su pequeña manito mientras ella agarraba uno de mis dedos—.

—Al parecer le caes bien.— comentó Alicent —.

Yo solo sonreí.

Cuando la pequeña Helaena me soltó fui donde Aemond.

—Que lindo bebé.— me acerque e hice lo mismo que con Helaena—.

Sentí que alguien estiraba la falda de mi vestido.

Agaché la mirada y era Aegon.

—Cuando hace eso, es por qué quieren que lo cargue.— comentó una de las doncellas—.

Así que lo levanté e hice que se echara entre mis brazos y empecé a mecerlo dentro de poco se quedó dormido.

TOC TOC

—Pase.—dijo Alicent.

Era un guardia.

—Majestad, el príncipe Daemon quiere ver a Amelya.

Alicent soltó a Aemond y se lo dio a una de las cuidadoras.

—Tranquila ve.

.

.

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Cuando llegamos a la habitación, el guardia tocó la puerta.

Y se escuchó un pasé.

—Principe Daemon, aquí está Amelya.

— A quién llamás Amelya.

Está molesto, se nota en su rostro.

—Principe...

Daemon lo tomó del cuello y lo levantó.

—Que sea la última vez que te dirijas a ella por su nombre, dentro de poco será mi esposa y llevará el título de princesa. Entendiste?

El guardia no dijo nada.

—Acaso te quieres quedar sin bolas.

—No...

Al parecer eso es lo que faltaba para ese guardia.