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La luz del sol empezó a chocar con los párpados dormidos de Valentín, ocasionando que abra sus ojos lentamente, despertándose de su increíble sueño.

Bostezo intentando estirarse. "Intentando" porque cuando estaba por hacer lo que quería, sintió unas manos en su cintura, se giró a ver al responsable del acto.

Daniel Ribba.

Se encontraba dormido, con la boca entre abierta y con el ceño un poco fruncido, aferrándose al cuerpo de Valentín. El ojiazul sonrió apreciando al más bajo.

No le molestaría despertar así por más días, su día se había alegrado en un 100% al ver esa carita.

De la nada, Daniel empezó a moverse en señal que iba a despertar, Valentín cerro los ojos, simulando que estaba dormido. No quería ser tachado como acosador cuando Daniel se diera cuenta de que lo estaba viendo dormir.

—¿Valen?—Preguntó el morocho con voz ronca, una que causó que el corazón del mencionado se acelerará como loco.—

—¿Si?—Preguntó, abriendo los ojos lentamente.—

—Hola.—Rió bajito.—

—Hola.—Contesto acariciando la mejilla de Daniel, era imposible no intentar abrazarlo y llenarlo de mimos cuando tenía esa carita.—

—¿Beso mañanero?—Preguntó sonriendo.—

—Lo que vos quieras.—Se acercó para unir sus labios.—

Era un pico largo, sin lenguas o saliva de por medio, solo un beso.

—La concha de mi tía, aunque sea desayunen.—Escucharon la voz de Monzón en las escaleras, que venía con dos sartenes en mano—Queria despertarlos yo, me ganó sus ganas de chapar, suban, Mateo está preparando el desayuno con el Duketo.—Empezó a subir las escaleras.—

Se levantaron de la cama sin muchas ganas, Valentín empezó a quitarse la ropa para cambiarse. Daniel sintio la sangre subir por sus mejillas al ver su cuerpo, se tapo la cara con las sábanas para no seguir viendo, no es que no quiera, pero se sentía muy acosador.

—¿Querés que te preste ropa para que te cambies?—Preguntó Valen, sonriendo ante la acción de ribba.—

—Porfavor.—Asegurandose de que Oliva terminará de cambiarse, bajo la sábana.—

—Tengo este short que me compraron mis padres, no se sabían mi talla así que lo pidieron como tres tallas menos que la mía y...Este buzo te quedaría lindo.—Puso la ropa sobre la cama.—

—Gracias.—Dijo Dani, empezando a desvestirse ahora él.—

En cambio de Ribba, Valentín no quitó la vista, no se molestó en disimular tampoco, veía como el más bajo se cambiaba.

—Re atrevido sos para ver cómo me cambio.—Se burló cuando vio que Valentín no le había sacado la mirada para nada.—

—Y pensar que todo eso me voy a comer algún día.—Ahora el que bromeó fue Valentín.—

—Que trolo.—Rió Dani.—Vamos, tengo hambre.—

Dicho esto, ambos subieron a la cocina.

El olor a panqueques no se hizo de esperar, olía delicioso. La calma reinaba en el lugar, era silencioso y el único sonido era el del fuego cocinando la masa en el sartén.

Al menos así era hasta que se empezaron a escuchar sartenazos.

—¡Arriba Manuel, arriba Tiago!—Se escucho a Lit gritar.—

Al cabo de unos segundos, el mencionado bajo corriendo con un Tiago bastante adormilado persiguiendolo, tanto que cayó al piso antes de poder atrapar al peliblanco.

' ' E N C U E N T R O ' ' ; [Trapers - Ships variados]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora