Mundo Inesperado.

18

BELLA

4 MESES ATRAS

Recuerdo esa noche, el ambiente estaba tranquilo, relajante, me había dispuesto a terminar el libro que me había cautivado tanto, tenía todo preparado en la sala, con mi tasa de café solo la luz de la sala encendida, ese día había llovido en la tarde lo suficiente para que la noche estuviese fría y acojedora definitivamente era el ambiente perfecto para terminar de leer THE LIE OF THE MOON es un libro de una joven escritora, por lo que ví era su primer libro y aunque es primeriza tenía mucho talento para la escritura,  después de acomodarme y estar sentada leyendo por aproximadamente una hora y media escuché tocar la puerta, no quería levantarme, estaba muy agusta sentada y ya había llegado al clímax de la historia, pero seguían insistiendo así que tuve que dejar el libro sobre la mesa e ir a abrir la puerta.

– Ya voy, ya voy, ¿no han visto la hora? Estás no son horas de visita–Maky ya tenía un mes que no venía a la casa por su trabajo, me llamo el día anterior diciéndome que vendría en la semana que me traía una sorpresa, yo solo quería verlo, me hacía mucha falta, tenía mucho que contarle, después que nuestra hermana muriera nos hicimos más cercanos, su muerte nos sorprendió mucho pero en nuestros padres fue mayor el impacto tanto que no quisieron seguir viviendo ahí, cuatro años después  compraron una casa, en una ciudad lejos del pueblo nos íbamos a ir todos pero a Maky no le gustaba la idea de irse de ahí y dialogó para poder quedarse en el pueblo, yo tampoco quería irme y mucho menos quería dejarlo solo y convencimos a nuestros padres de quedarnos ahí, el término la secundaria luego de dos años.

Todo iba bien, Maky normalmente era quien hablaba con mis padres, yo  lo hacía en ocasiones porque no se me daba bien hablar mucho por un celular pero ellos comprendían, nos enviaron dinero para comprar aquí lo que uno necesitará, ellos no se llegaron a enterar que Maky por un tiempo llegó a consumir drogas, pero me prometió dejarlas, ya tenía un año que no ingería nada ya hasta había conseguido un trabajo nunca me dijo sobre que era, tampoco es que insistiera mucho en averiguar de que trabajaba, pero nunca me llegue a imaginar que sucedería asi.

Vi por el ojo mágico de la puerta para saber quién era, pero no ví a nadie así que pregunté –¿Quién es? – sin embargo nadie me respondió, comencé a pensar de que se trataba una broma de los hijos de los vecinos así que abrí la puerta y no pude creer lo que había visto.

Inmediatamente la presión en mi pecho empezó a invadir me por completo, un calor emanaba de mi cuerpo, estaba completamente paralizada, sentía un mar emociones innumerables que casi no me permitían respirar, sin embargo la ansiedad ganaba a toda costa pudiendo envolverme por completo, mi cabeza empezó a estallar de dolor por lo que mis ojos presenciaban,  no podía emitir palabra alguna, mi vista se empezó a nublar por mis lágrimas,  el miedo me consumía cada vez más, de un momento a otro caí de rodillas al lado del cuerpo de alguien que algún día fué mi hermano... La impotencia tomó el lugar de la ansiedad, quería hacer muchas cosas en ese momento sin embargo, seguía observando el cuerpo de mi hermano aún sabiendo que era una autotortura sumado a la ganas de querer regresar lo conmigo, el encenario que había estado no me dejó pensar con claridad  y por puro instinto comencé abrazarlo, el dolor que sentía era tanto que ahogo el grito que quería emitir.

Comenzó a invadir me la melancolía seguido de todos los recuerdos junto a él, no podía creerlo, todo estaba bien el se había reformado hasta se consiguió un trabajo, entonces ¿por qué pasó esto?

Y como si de una ninja se tratara alguien se apareció frente a mi, era un hombre alto y robusto, su presencia me ponía un poco nerviosa, nos estaba mirando fijamente sin decir una sola palabra, no sabía que hacer estaba asustada y cuando estaba a punto de romper el silencio el hablo.