- Soldado, ¿qué cree que hace?
- Entrenar señor.
- ¿Eso te parece entrenar? Cuarenta y siete abdominales. ¡Ya!
- Comandante, los papeles que pidió esta mañana.
Erwin tomó los papeles y miró a la mujer hacer los abdominales.
- Levántese soldado, venga conmigo. No parece buena en el deporte, pero no puede seguir librándose de todos los ejercicios.
- Sí señor.
- No te oigo, y llámame comandante Smith.
- ¡Sí comandante Smith!
- Vamos, me haces perder el tiempo.
Todos miraron con pena a la muchacha.
Todos los días, Erwin se acercaba a ella para mandarle y ser duro con ella.
Pero ella seguía firme, incluso por las noches cuando sus compañeras le preguntaban si estaba bien o si necesitaba ayuda.
Sentados ocupados con los informes, él la miraba de vez en cuando.
- ¿No sabe escribir soldado?
- Sí comandante Smith.
- Pues hágalo bien. ¿Y leer? Espero que no esté firmando algo indebido.
- Sí comandante Smith. Leo antes de firmar comandante Smith.
- ¿Qué has firmado hasta ahora?
- La autorización de los tres muros para salir mañana comandante Smith.
- ¿Sólo eso? No puedo creer que sea tan incompetente. Va muy despacio.
- Lo siento.
- ¿Sólo sabe decir eso? ¿Y qué le he dicho que termine las oraciones?
- Comandante Smith.
- ¿Por qué no lo has dicho?
- Se me olvidó comandante Smith, lo siento mucho.
- No llore, no estamos en el colegio.
- No iba a llorar comandante Smith.
- No tengas la osadía de contestarme.
Alguien llamó a la puerta interrumpiendo su conversación.
- ¿Ocurre algo Levi?
- Ocurren muchas cosas en el mundo. Dijiste que desayunaríamos juntos.
- Me surgió un imprevisto, puedo ir ahora mismo.
- Y Hange ha descubierto algo interesante.
- Pensé que me lo traería escrito en carta, como hace siempre.
- Es mejor que lo veas tú en persona.
- Está bien. Retírate soldado.
- Sí comandante Smith.
Erwin la observó irse.
En cuanto ella llegó a la puerta, agradeció en silencio al capitán, él asintió en silencio.
- ¿Por qué eres tan duro con ella?
- Quiero que mis soldados sean los mejores.
- Ella es la mejor, no hace falta que estés siempre detrás de ella. Vas a destrozarla.
- Ella ya me ha destrozado a mi.
Levi se dio cuenta - Sigue así, y te destrozará su rechazo.
- Ningún soldado debería provocarme todos estos sentimientos. Son inútiles y le haré daño.
- Ya le haces daño. Déjate de tonterías y sed felices mientras duréis. Odio que esté distraída en los entrenamientos por miedo a que vengas. La próxima que vengas y te la lleves, te hago comida de titán, o te partiré las dos piernas. Tú eliges.
Pero la cosa siguió hasta que en una misión, un titán la tomó.
Él la salvó y la llevó a la rama más alta.
- Comandante Smith, debería haberme...
- Termina esa frase y te suelto. ¿Por qué no te has defendido?
- Usted lo dice siempre comandante Smith, soy una...
- A veces no digo lo que realmente pienso.
- ¿Y qué piensa ahora comandante Smith?
- No quiero perderte. No voy a perderte. Eres lo que más amo de este mundo.
- Comandante Smith, pero usted...
- Lo sé. No sé controlar mis emociones, lo que me hace preocuparme a veces por mí mismo. A veces pensarás que he perdido toda mi humanidad, a veces me tendrás miedo, pero prometo que a partir de ahora te trataré como de verdad te mereces y quiero. Déjame quedarme a tu lado.
- Sí comandante Smith.
- Deja de llamarme así. Erwin también está bien.
- Está bien.
En el siguiente entrenamiento, Levi bufó al ver a Erwin llegar.
- Deja de aterrar a los soldados.
- Soldado - Erwin lo ignoró y fue hasta ella.
Ella hizo el gesto de la legión.
- Comandante Smith.
- Esta mañana no estaba en su cama, ¿se puede saber por qué?
- Se nos convocó en el entrenamiento comandante Smith.
- Soldado Smith, le ordeno que me dé el beso de buenos días, y que la próxima vez se me avise, no me gusta despertar solo.
- A la orden Erwin.
- Oye, te dije que fuerais felices, no que me la distrajeras - se quejó Levi.
- Te la robo un rato.
- ¡Oi!
- Soy el comandante.
- No abuses de tu posición para estar más tiempo con tu novia.
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One shots Erwin Smith
Fanfic¿Te imaginas con Erwin Smith? Ya sea en su mundo o en el mundo de hoy en día, ¿no sería genial? Pues léelo