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Bakugo Katsuki era un enigma que todo el tiempo aseguraba estar por encima de todo y de todos, y que tenía a quien le daba la gana cada vez que quería, hasta que el pequeño omega peliverde, que lo admiraba y siempre lo seguía, dejó de buscarlo y se sintió de alguna manera vacío.
-Maldito nerd, ¿porque mierda no me respondes?
Había intentado llamarlo, pero de no respondía sus llamadas o mensajes y peor aún, había comenzado a salir con el idiota de Shigaraki, pero de ninguna manera permitiría que el Alfa estúpido se quedara su Omega.
-Solo espera maldito Deku, nos veremos todos los días te guste o no.
Había sido bastante difícil persuadir a Endeavor y exigirle que no contratara a su Deku, hasta que, ayudado por la héroe Miruko, consiguió unas grabaciones que tenían aproximadamente 1 año de haber sido grabadas y en las que se ve a Endeavor revolcándose con Hawks. Una sonrisa maliciosa se formó en el, era perfecto para la ocasión.
¿Y que le costó la ayuda de Miruko?
Un mes completo con su tarjeta negra sin límites. La maldita perra se compró un jodido auto.
-¿Qué quieres? ¿No tuviste suficiente con mi maldita tarjeta? - Gruño molesto a la heroína que se asomaba en su oficina.
Miruko se apoyo en la entrada con los brazos cruzados. - Vamos sabes que es divertido ¿por qué te volviste tan aguafiestas? - a pasos lentos se acercó a el escritorio sentándose encima. - Sabes muy bien que traigo todo tipo de diversión al dormitorio.
Perra, busca otro juguete o lárgate con el maldito pollo y déjame en paz, y eso fue hace malditos años, ahora fuera de mí maldito lugar o te explotare la cara - Gruñó con furia.
Ahhh pero que humor de mierda tienes -se quejaba la albina - Hawks ya tiene pareja y no quiere jugar y tu tampoco, al menos dime qué no olvidarás los buenos viejos tiempos fue lindo que dejaras de ser virg.
-¡¡CÁLLATE!!- interrumpió Katsuki - desde ese día todo fue un maldito error.
-Si, si, nos vemos señor "Yo tengo lo que quiero", ojalá te quedes solo, alguien como tu no merece alguien tan lindo como Izuku. - se dispuso a irse y cerró la puerta de un portazo.
Sus palabras no fueron escuchadas por el enigma, se hallaba perdido en sus pensamientos.
-Maldita sea, maldita sea ¿porque no puedes simplemente volver a mi Izuku? - recuerdos amargos llegaban a su mente de aquel tiempo donde era un completo idiota.
Flashback.
El día que lo nombraron Héroe #1:
-Kacchan, Kacchan sabía que lo harías eres increíble - felicitaba el Omega pecoso - y yo quería saber si tal vez tu quieres... bueno...
