estoy muy enojada.
tengo ganas de gritarte en la cara y de decirte que sos la persona más egoísta que conozco, que no entiendo por qué sos así. que merezco que me trates mejor. que no entiendo cómo una persona como yo está tan enganchada de alguien como vos. tu imagen me da rabia, aprieto la boca, chocan mis dientes.
estoy enojada.
y me duele, me desgarro. me duele el pecho.
quisiera que vengas a abrazarme y que me digas que vas a hacer las cosas bien, que me seques las lágrimas y me levantes de la cama, que me digas que ya está, que no hay más motivo de llanto, que intentes hacerme reír y me empieces a cocinar algo rico. que tardaste, pero que te diste cuenta que lo que te pido es realmente poco. que me queres y que sabes que podemos ser felices. un verano en la patagonia.
pero sé que jamás vas a hacer eso. y me enoja, y me duele, me rompe, me destruye.
cómo es que pese a todo sigo eligiendo tu abrazo que es el que me aplasta.
y sé que voy a estar bien si me alejo, pero me rompe la cabeza saber que voy a estar bien SIN VOS. y que vos vas a estar bien sin mi.
y que va a llegar un momento en el que te olvides. y yo me olvide.
de tu voz, del tacto de tu piel. a qué sabe tu boca. del sonido de tu risa. del maullido de tu gata. del barullo que se crea cuando hablas con tus amigos. de la dulzura de tu prima. a qué sabía tu comida.
me voy a olvidar de todo, menos de tus palabras.
odio ver a la gente caminar de la mano,
es el claro recordatorio de que no vas a sostener más la mia.
nunca.
la resignación de saber que lo unico que puedo hacer con los sentimientos que tengo hacia vos es dejar que se desvanezcan.
