Capítulo 22: El Poeta y la Artista

831 49 2
                                    

–Chu, gracias por todo como siempre

–No es nada pequeña Liz, vamos, que debemos abordar.

–Rosie, me puedo sentar contigo

–Si Lili, claro que puedes. Amor nos dejas solas un momento por favor y acompañas a Jendeukie

–Sí, mi amor.

–Nena, quería hablar contigo, porque, en realidad no hemos tenido tiempo de hacerlo a solas.
Desde niñas tú has sido muy especial para mí, más allá de Chaesoo –sonrió–. Siento que eres el corazón de nuestra amistad. Te amo muchísimo y Jisoo es muy afortunada de tenerte

–Y yo de tenerla a ella también

–Así es. La verdad es que tengo una sorpresa para ustedes. Son dos cuadros, uno lo pinte mientras estaba en Malasia que es la continuación del otro que jamás llegue a mostrar en Londres

–Pero...

–No digas nada aún. Es de una colección especial. Por ese motivo pedí que los mantuvieran apartados de las obras que deben estar ya listas en la galería.
Quiero que las veas primero; ¿recuerdas cuando posaste desnuda para un proyecto que realice en la universidad?

–Sí, el que nadie supo

–El mismo. Jamás conté nada de esa sesión que realizamos, bueno, eso acordamos.

–Lili, no he olvidado ese momento, sé que no será bueno que ellas lo sepan. Estaba enojada con Chu, y Jennie como siempre te había hecho una escena de celos, que ni siquiera recuerdo lo que paso

–Ni yo

–Ese día debe quedar entre nosotras. No fue un error para mí, fue algo que paso, éramos jóvenes y...

–Para mí tampoco fue un error Rosie.
Estos cuadros no muestran tú cuerpo por completo, sólo parte, al igual que el de Chu, están realmente hermosos, pero ya sabes, Jen es muy observadora y quizás mal interprete lo que sucedió.

–En realidad jamás pensé que ambas terminaríamos desnudas y borrachas.

–Eres la única persona aparte de Nini que conoce a Mr. L ja, ja, ja

–Por eso te digo que es algo que no olvidaré jamás ja, ja, ja. Lili, ese día aprendimos de nosotras y de lo que queríamos para nuestro futuro. Prometimos que no importaría lo que pasara con nuestras novias, que siempre estaríamos la una para la otra y así ha sido.
Pueden pensar que ocurrió algo más entre tú y yo, pero mi corazón está tranquilo, jamás he engañado a Jisoo y tú a Jennie ¿verdad?

–En estricto rigor, no la he engañado jamás, porque lo que lo qué paso fue cuando nos separamos

–Lalisa Manoban, no sé si quiero oír lo que dirás... Jisoo no lo sabe ¿cierto?

–Asintió.

-Una de las muchas noches en Malasia, en realidad una de mis peores noches, salí a un bar local, bebía con Cedric, quien es dueño del bar, hablábamos de todo. Desde el primer día, se comportó de manera muy amable y correcta, a veces él llamaba a casa para que me fueran a buscar, en fin esa es otra historia.
Esa noche llegó una mujer extremadamente sexy, no tanto con Jen, pero si muy hermosa. Casualmente tailandesa, no recuerdo su nombre exactamente...

–Manoban, no me vengas con esa mierda que no recuerdas el nombre, dímelo ahora, ¿ok?

–Rosie, me das miedo cuando intentas abrir los ojos para amedrentarme, ja, ja, ja

–Manoban, no lo repetiré, y no te rías de mis ojos, sé que los amas... continua por favor

–Si, tienes razón, recuerdo su nombre porque la conozco y tú también

El último concierto de Jennie Kim  -JenLisa Gip-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora