Capítulo 7: Nuestras Memorias

910 58 2
                                    


Meses después de la visita de sus padres


—Lisa, veo que el día de hoy estas muy bien acompañada

—Sabina, ya ha pasado más de un año y medio de mi separación con Jennie y un poco más de un año de nuestras sesiones.
Llegó el momento de presentar a mis amigas de toda la vida... siempre han estado a mi lado.
Acá vamos, Hirai Momo o sólo Momo, Nayeon, Sana, Tzuyu, Irene, Seulgi, Chaeyoung y Mina

—Qué bueno tenerlas junto a Lisa, Esta es una de nuestras últimas sesiones pensamos y estoy completamente orgullosa con el avance que ha tenido. Ustedes serán parte de las personas cercanas que estarán en su regreso a Seúl...


—Estamos felices con la invitación de Liz, fue una sorpresa enorme el que quisiera vernos. Todo este tiempo hemos estado pensando en ti y...

—¿Momo verdad? ¿Y qué pensabas?

—Que la extrañé. Lo siento, pero no puedo aguantar mis lágrimas. ¿Qué paso Liz? Por qué te fuiste así de nuestras vidas...

—imagino que tienen demasiadas preguntas, pero calma, Lisa las responderá cuando está lista para hacerlo, por lo pronto quiero saber un poco de ustedes y de la relación con ella.



Recuerdos


La historia


En su nuevo instituto, conoció a Jisoo, un curso mayor que ella.
La primera semana durante los descansos, Lisa se sentaba sola bajo un gran árbol a dibujar mientras oía música y se movía suavemente al compás de ella. Estaba acostumbrada a la soledad, no había tenido amigos, sólo sus hermanos con los que jugaba en casa. Está rutina fue seguida por Jisoo sin que la chica del flequillo lo notara. Ya no podía esperar más...



—¡Hey! ¿Estás ocupada? Mi nombre es Kim Jisoo ¿y el tuyo?

—¡Ho.....hola! Soy Lalisa Manoban, pero dime Lisa.

—Te he visto unos días y siempre estás sola...

—Sí, es que soy nueva acá, yo vivía en Tailandia y ahora estoy en Seúl con mis abuelos

—¿Puedo ver tus dibujos?

—Emm... sí claro, no soy muy buena...

—Pero no bajes tu mirada Liz, no sientas vergüenza. ¡Son muy lindos!

—Gracias. Te puedo hacer una pregunta

—Sí

—¿Siempre giras en la punta de tus pies?

—Perdón –se sonrojo– es que a veces no me puedo quedar tranquila


Ambas rieron.

Semanas después, luego de clases, caminan como siempre por un parque cercano, el buen tiempo se hacía presente.



—Lisa, ¿te gusta bailar?

—Sí, me gusta, pero, me da un poco de vergüenza

—¡Baila conmigo! anda dale, Liz, no tengas miedo

—Chu, estamos en un parque, no...no...no podemos bailar acá

—¿Quién dice que no Lalisa? Dame tú mano y te quedas a mi lado, ¿eso era tan difícil? Pondré algo de música y "voila"

—Te sigo entonces, si no hay más opciones ja, ja, ja

—!Wow! Liz, bailas muy bien! Existe algo que no puedas hacer amiga mía...

—Sí Chu, muchas cosas.


Cuando iban rumbo a sus casas, Lisa la toma del brazo y en un tierno gesto le dice que deben hablar. Los pensamientos de Jisoo eran demasiado rápidos tanto o más que sus pies al bailar y estaba algo nerviosa, se repetía una y otra vez, "Lisa eres mi amiga y no me gustas"
Detuvieron su andar para sentarse en unos pequeños asientos de madera


—C...C.h.u

—Respira Lili, tranquila

—Es que, es que...si somos amigas quiero que sepas algo de mi

—Me dijo "amigas". Liz, que te pasa, estas triste, ¿alguien te ha dañado?

—No, más bien si, Chu, es que...

—Lili, mírame. No tienes que bajar tú cabeza. Mírame... no llores por favor, me estas asustando... ¡habla de una vez, me estas matando!


—¡Kim Jisoo soy intersexual –respiró con alivio

—¡Diablos, Lisa! ¿Realmente existe algo que no puedas hacer?

—Yo, yo...pensé... que saldrías corriendo y...

—¡Hey Liz!, soy tú amiga, ¿Por qué debía salir corriendo? Entiendo lo que es ser intersexual, he leído mucho y... –apoyando su mano sobre el mentón– ¿realmente tienes un pene, es grande?, ¿lo puedo ver?, perdón, pero tengo demasiadas preguntas

—¡!!Chu, me da vergüenza!!!



Lisa había encontrado por fin a alguien que la quería a pesar de ella sentirse "rara"
Con el correr de los días, le fue contando su historia en Tailandia, porque se fue de casa, porque no tenía amigos. Ambas concluyeron que lo peor había pasado. Incluso se permitían bromear con su condición, llamando Mr. L, a su pene. Claro este nombre es de exclusiva responsabilidad de Kim Jisoo.


—Sabes pequeña Lili, te prometo que no dejaré que te vuelvan a dañar nunca más


Kim Jisoo, provenía de una familia muy adinerada de Corea del Sur. Sus padres, dueños de prácticamente todos los hoteles de Lujo de Corea y Japón. Pragmáticos, fríos eran con sus dos hijas. La mayor Yeri era la siguiente al mando del imperio Kim, 4 años mayor que Jisoo. Hija perfecta; sobre todo por la obediencia entregada a sus padres.

El último concierto de Jennie Kim  -JenLisa Gip-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora