Babysitter || JakeSeung

EPISODIO 7.

El auto giró dando una curva y Heeseung cerró los ojos suspirando hondamente, quería relajarse, pero su cabeza estaba empezando a dar vueltas y su corazón estaba agitado.

Se sentó derecho dejando de apoyarse en Jake y le soltó la mano por un momento solo para llevar ambas manos a su cabeza y sobarse la sien. 

Jake lo ignoró solo deseaba que llegaran a la dirección que le había dado al taxista, no quería hablar, sus manos estaban frías y tenía un dolor incómodo en el vientre. El auto frenó y Jake abrió la puerta muy rápido saliendo como si escapara de ahí, Heeseung reaccionó y trató de salir apurado cosa que no pudo porque sentía su cuerpo un poco pesado. 

—¿Estás bien? —Jake preguntó tomando su brazo y Heeseung lo miró y asintió.

—Hum, sí.

Miró al frente y una enorme puerta lo conducía hacia un bonito lugar, el zoológico de la ciudad. Se quedó sorprendido por un momento y un recuerdo de su niñez vino para hacerlo sonreír. Hace años, cuando quizá era de la edad de Ni-Ki, había venido con sus padres cuando estos estaban muy unidos y parecía ser todo perfecto. Sabía que adentro había un lago de patos silvestres y que además habían muchos animales para ver e incluso al otro extremo del gran parque un supermercado con cine y juegos.

—Jake. —el nombrado volteó a verlo y Heeseung se le pegó como un niño—. Me trajiste al Zoo. —Sonrió emocionado, no se lo esperaba e incluso estaba temiendo que lo llevara a un lugar privado e intentara aprovecharse.

—Sí, pero no te emociones, es que en sí es como entrar a la cárcel. —Heeseung se puso un poco serio—. Sé que a muchos les gusta el zoológico, a mí en parte sí, pero no todo es como lo pintan.

—Lo sé —dijo serio guardando compostura—. De todas formas es un lugar bello. —Jake lo miró y posó su mano en su baja espalda para animarlo a entrar.

Heeseung enrojeció ante eso y el mareo aumentó un poco. Trataba de pensar en el porqué de esa sensación extraña que le estaba arruinando la tarde porque no podía estar tranquilo y relajado.

Jake fue por las entradas y el pelinegro sacó de su mochila su celular para entretenerse mientras esperaba viendo varios mensajes de texto de parte de Winter, suspiró al vacío, esperaba y no se haya molestado.

«No puedo creer que te hayas ido con ese tipo así de rápido.» Heeseung torció la boca, tampoco sabía por qué tan rápido había accedido, pero así se habían dado las cosas. «Me imagino que ya debes estar en el trabajo, de todas formas te deseo suerte y te veo mañana. Espero que ese sujeto no te esté causando problemas.» Heeseung busco el numero de la chica en su agenda y la llamo.

—Win...

—¡Hee! Qué agradable sorpresa. —Sonaba emocionada.

—Pues quería saber si estás bien.

—Ajá, lo estoy tú como vas—dijo seria y Heeseung se puso un poco nervioso.

—No pasa nada, solo estamos paseando, sé que te dije que él era el peor tipo que había podido conocer y bueno, es un poco así, pero también es agradable.

—Sí, claro, lo puedo imaginar. Solo ten cuidado Hee, puede tener malas intenciones.

—Lo sé, lo sé; tampoco soy un niño, Win, creo poder defenderme. —Ella suspiró un poco intranquila y Heeseung notó eso—. Descuida, no pasará nada.

—Le interesas a ese tipo, se le nota a leguas.

—Pero a mí no me interesan y no me van los hombres.