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Temprano al otro día me levanto para ayudar a Mia e ir a comprar, hago una pequeña lista mental de las cosas necesarias mientras vamos en el auto, muevo mi cabeza cantando una vieja canción.

-¿Quién te llamó ayer? -ella pregunta cuando bajamos, se había contenido bastante- lucias un poco extraña cuando bajaste del auto

-Solo fue, equivocado -miento, sabía perfectamente quién era- bien...solo digamos que era alguien, y este supuesto personaje es...alguien que conocí cuando volví a Sao Paulo después de, Jesse -aprieto suavemente los labios, mencionarlo ya no me entristece tanto como antes.

-¿Un ex novio?

-Algo así -carraspeo y muevo mi cabeza- mira que bonitos están esos tomates, hace tiempo no como una buena ensalada -cambio de tema.

-Si, ensalada...si quieres -ella entendió que no quería hablar de eso- podría hacerte de esos sandwiches que prepararemos en los Ángeles, las cosas se ven más frescas por aquí

-Eso seria increible, con gusto ayudaria degustando unos cuantos sandwiches solo para mi -ambas reímos mientras caminamos, luego de un rato llevamos varias cosas, aunque Mia decide detenerse para comprar unas naranjas- se ven deliciosas, obrigado -le agradece al vendedor.

Sonrió tomando una mitad que el amablemente nos había partido cuando unos grandes brazos nos envuelven, levanto mi codo de inmediato dispuesta a golpear en la cara a quien nos tomó, pero lo logró reconocer, más viejo, pero seguía siendo el.

-¿Vince, qué haces? sueltanos -intento soltarme sorprendida.

-Silencio, caminen -nos empuja fuera y nos subimos a mi auto, comenzo a conducir rápidamente al taller.

Cuando llegamos todos nos miraron confundidos, casi nadie conocía a Vince y quienes sí, de inmediato reaccionaron bastante mal, Brian se levantó dispuesto a encarar a mi viejo amigo, Mia se interpuso claro.

-No, tranquilo, espera. -lo detiene- la gente de Reyes nos estaba esperando en el mercado, Vince nos salvó la vida

-Es cierto, rubia -murmuró junto a Vince quien asiente apoyándonos, ambos hombres se miran por unos segundos mientras Han se acerca para ayudarme con unas bolsas y caminar a la pequeña cocina.

-¿Te encuentras bien?

-Si -sonrió de lado- no tienes que preocuparte por mi 

-No tengo, en eso tienes razón -él asiente con una fina sonrisa- pero quiero hacerlo

Sonrió de costado antes de comenzar a preparar las ensaladas y el arroz para la parrillada que prepararon los chicos mientras mantenía alejado a Rico y Tego que intentaban meter las manos en la comida, uno para comer y el otro para experimentar.

Luego de un rato tomo una cerveza helada y me siento junto a Tej en el sofá, entrando a la conversación que tenía con Han y Roman.

-Estamos en Brasil, la buena vida -celebra el moreno- muy pronto tendrás un poco más de diez, once millones de dólares, ¿que harás con tu parte? -le pregunta al hacker.

-¿Yo? -duda un poco mi amigo mientras Han quita la chapa de mi botella- estaba pensando en abrir un taller mecánico en casa, donde las personas puedan llevar sus autos sin que las estafen por completo

-¿Enserio?, ¿tu sueño en la vida es tener un trabajo? que estupidez -se queja Roman mientras yo río acomodándome con las piernas cruzadas- ¿porque querrías eso?

-No es una estupidez, yo digo que si amas lo que haces esta bien -apoyo a Tej- serias mi mecanico de confianza

-Yo ya sé que voy a hacer con mi parte -camina Rico con un plato lleno de carne con aspecto bastante...poco apetitoso- le pagaré unas clases de cocina a mi amigo

-¿Vez vez? otra vez con esa actitud negativa, el dinero no me importa

-Necesitará más que dinero para aprender a cocinar, eso esta horrible -rió levantando ligeramente para mirar el plato, agarro un tenedor y comienzo a revisar si había algo rescatable- pero escuche que estan buscando un chef en un refugio para animales

-Quizás podrías dárselo a los cachorros abandonados -propone Han acercándose un poco a mi, sonrió al recordar que en la madrugada, cuando me levanté al baño había encontrado una caja con pequeños perritos cerca del taller junto a Han, el se levanta y toma algo de carne en un plato.

-Al menos ellos si lo van a disfrutar, Tego -me burlo divertida mientras camino tras Han, al mismo tiempo que mis amigos se reían. 


***


Luego de darle la carne y agua fresca a los cachorros vuelvo riendo con Han, él podría mostrarse como alguien bastante distante y ajeno, pero la verdad es que es muy simpático y tan...guapo. Podría parecerles que mi gusto en cuanto a hombres es extraño, pero a mi me agrada mas llamarlo; magnético, por que siendo sinceros estar con un solo tipo de persona en toda tu vida para alguien como yo es aburrido, es lo mismo que con los autos, puedo amar profundamente tanto un clásico como un deportivo.

-Espero que nos hagas los padrinos -bromeo viendo a Mia mientras junto a Roman hacemos poses divertidos- seriamos los mejores para ese niño

-Oh no, no, no antes prefiero dejarlos a un par de lobos salvajes que Roman -ríe Brian con el resto.

-¡Salud! -levanta la voz Dominic llamando la atención mientras nos reunimos con nuestros tragos- el dinero viene y va, sabemos eso pero lo más importante en la vida siempre serán las personas en esta habitación, aquí y ahora, salud mi familia -sonrió al terminar el brindis.

-Ahora, una foto para recordar el momento antes de la victoria -rio sacando mi teléfono para tomarnos una selfie con todos entre muchas risas- todos digan, manos arriba

-¡Manos arriba! 






















(Maraton 1/?)

Enamorado de una Brasileña | Fast & FuriousDonde viven las historias. Descúbrelo ahora