Capítulo 20: Ofensiva Imperial 4

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En una tienda de campaña fuertemente custodiada por soldados imperiales se encontraba Andrés atado al pilar central de la tienda al igual que sus pies. Estaba totalmente ido, trataba de procesar el hecho de que había sido capturado y de que su compañero posiblemente había muerto. Mientras trataba de procesar todo, llegó Damm junto a Tyuule y varios guardias.

El general se acercó al soldado y se arrodilló frente a él.

"Soldado ¿Hablas nuestro idioma? ¿Cómo te llamas?

"Andrés..."

"Soy el General Damm. Iré directo al grano, quiero que nos enseñes a usar vuestras armas".

"¿Qué?"

"Hemos capturado diverso material, no solo en el lugar del incidente del dragón, también en las últimas emboscadas, aprovechando la confusión y vuestro vehículos dañados se va robando armamento, aunque eso supone numerosas bajas...Y no voy a permitir que sean bajas en vano".

"¿Y mi compañero?"

"No te preocupes, esta vivo, muy mal herido pero vivo". Seguidamente entraron varios soldados portando objetos dentro de mantas.

Damm agarró una de estas y la deshizo dejando ver un fusil G36 intacto.

"Esta es el arma que portabas".

"No voy a hacer una mierda".

"No puedo asegurar tu seguridad si no colaboras".

"¿Y hacer que más de mis compañeros mueran? ¿Te crees que soy estúpido? Ya puedes ahorrarte saliva, podéis matarme y colgarme donde queráis o lo que sea que hacéis por aquí".

"¿Estás seguro?"

"Si, al contrario que vuestro ejército, al que pertenezco somos todos voluntarios de un mundo en el que hay muchas mayores facilidades, por lo que no nos vemos obligados a alistarnos o nos obligan, yo vine aquí con la moral alta y vine aquí queriendo pelear junto a mis compañeros. Haced lo que queráis".

<<¿Todos voluntarios?>>

El general se dio media vuelta sin decir nada para justo antes de salir ser detenido por Tyuule.

"General Damm ¿podría interrogarlo?"

Damm se extrañó "¿Qué?"

"Tengo un método que podría funcionar".

El general aceptó intrigado, así que Tyuule se fue, al poco regresó, aunque esta vez con unos soldados cargando una camilla de transporte con el compañero de Andrés lleno de quemaduras e inconsciente. Tanto Damm como Andrés se sorprendieron. Tyuule ordenó dejar la camilla frente a Andrés.

"¿Qué es esto Tyuule?" Le preguntó Damm.

"Le haré hablar".

Tyuule puso su tacón sobre el cuerpo del compañero, este sin inmutarse debido a su profundo "sueño". Andrés puso un rostro de odio.

"Zorra..."

"Iré al grano, o hablas o lo matamos".

"¿Y después que? Dudo que hayáis capturado a alguien más, yo fui estúpido y nada más".

"Si no dices nada incluyendo la posible muerte de tu compañero, te torturaremos y si ni con esas te mataremos, podremos probar con otro, tu decides". Cuando dijo eso último todo el mundo supo que estaba mintiendo.

"No habéis capturado a nadie..."

"Ponme a prueba".

Andrés estuvo en silencio por un rato, cansada de esperar, Tyuule le pidió prestada la espada a un soldado.

Gate:  Así fue el ejército Español (y alguno más) a pelear allíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora