Capítulo 33

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El soldado Andrés y el compañero fueron llevados al Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla, dónde también se trataban a soldados extranjeros, los más graves eran operados y transferidos a sus naciones, pero la mayoría estaban por heridas leves y no críticas.

Andrés llevaba 2 días ingresado en el hospital, se encontraba en la quinta planta, se habían tratado las heridas más graves pero en general estaba físicamente bien. Sin embargo a penas comía o bebía y se la pasaba mirando a la nada o por la ventana. Tenía numerosos apósitos, vendajes, una vía con suero y el timbre al lado. De repente llamaron a la puerta, aunque Andrés no contestó.

"Vamos a pasar". Dijo una voz familiar que llamó la atención del traductor.

Entró Félix junto a sus amigos, también se encontraban Piña y sus compañeras. Todos vestidos de forma casual, haciendo que Andrés no se percatara de que las conocía.

"¿Que hacéis aquí?" Preguntó sorprendido.

"¿Como que que hacemos aquí?" Preguntó molesto Félix. "Venimos a ver a un amigo que se a salvado del infierno". Contestó mientras se quitaba su chaqueta y se sentaba.

"Pero...¿Porque?"

"¿Tiene que haber algún motivo?" Le contestó Francis.

"Pero...Yo di información...por eso murieron esos italianos..."

"¿Y que se supone que tendrías que haber hecho? ¡Estabas literalmente secuestrado por un imperio de enfermos mentales en otro mundo! Además, sabemos que te chantajeaban con ejecutar al compañero".

"Hice algo horrible..."

"Pero no había elección, estabas en la peor situación posible, puede que incluso yo hubiera hecho lo mismo, puede que incluso hubiera seguido dando toda la información que pidieran...intentaste engañarlos...no hay forma de que hayas hecho algo malo, sobreviviste y conseguiste que el compañero se salvara".

Andrés quedó pensativo hasta que se dio cuenta que conocía a las 3 chicas, las cuales lo miraban apenadas por su situación.

"Ellas...¿Ella no es la Princesa?" Preguntó algo consternado.

"Si, no hay problema que lo diga, después de todo estarás aquí encerrado una semana mínimo y con guardias y la misión ya habrá acabado. Nos encargaron cuidar de ellas y que aprendieran de la vida civil y la sociedad para que en Alnus apliquen lo aprendido, en unos días tendremos nuestras vacaciones y si quieres puedes venir con nosotros".

"Entiendo..." Volvió a mirar por la ventana.

En la entrada del hospital había numerosa prensa grabando.

"Son pesados ¿Verdad?" Preguntó Santi.

"Cuando llegaba en la ambulancia lo único que escuchaba eran gritos y manotazos...cuando me llevaban en camilla vi como se amontonaban en la entrada y la policía y seguridad los empujaba..."

"Si...entiendo que su deber es informar...pero joder..."

"¿Te a visto tu familia?" Preguntó Félix.

"Si, estuvieron aquí ayer". En cuanto dijo eso miró de nuevo a las chicas. "¿No os sentís mal?"

"¿Eh?" Expresó sorprendida Piña.

"Pertenecer a una nación tan enferma...Si os soy sincero, me repugna que estéis aquí, me gustaría no veros". Dijo calmadamente sin mostrar ninguna emoción.

Eso sorprendió a todo el grupo, las chicas quedaron confusas.

"O-Oye, ellas son diferentes, la princesa me a contado varias veces lo que odia del imperio y que no le gusta lo que hace, incluso quería visitarte". Dijo Félix algo incomodo por la situación.

Gate:  Así fue el ejército Español (y alguno más) a pelear allíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora