My Love || ChanSoo [Terminada]

Prólogo

—Ser alfa es una mierda, no solo por lo que los demás esperan de ti sino al darte cuenta que hay ciertas cosas a las cuales no puedes negarte por la ridícula biología. Como tener fuerza bruta, las ventajas ante la cagada de gobierno...—Las personas que estaban escuchando al chico hablar torcieron la boca. — Los omega deberían tener vidas iguales a las de nosotros, empleos con buenos salarios, seguridad en las calles. — Continúo con el discurso. — Y podría seguir diciendo tantas cosas, pero solo finalizaré con esto.

El director del lugar tenía el rostro cubierto con sus manos, los profesores negaban ante la actitud del chico, mientras su mejor amigo sonreía orgulloso desde la puerta de emergencias.

—¡A LA MIERDA ESTE SISTEMA ESTÚPIDO Y QUE LOS ALIENS BENDIGAN A LOS OMEGA! TODOS AQUÍ LES DEBEMOS DE ESTAR AGRADECIDOS, LOS ALFA CONSERVADORES ME PUEDEN CHUPAR LAS PELOTAS. — Seguido de su grito, arrojo los papeles al techo para hacer una señal de paz con los dedos.

Los omega del lugar aplaudieron entre risas, mientras algunos alfa se mantuvieron estáticos en sus puestos.

Park Chanyeol, 17 años... expulsado del colegio por interrumpir al evento de graduación de sus mayores.

🐧||🐯

—No mamá, no voy aceptar ir a uno de esos eventos para conseguir pareja. ¡Estoy bien solo! — El pequeño miraba a su padre caminar de un lado a otro, los dibujos en la televisión parecieron menos interesantes en ese instante. —No es necesario... ya tengo un buen empleo. No necesito de un alfa para poder sacar adelante a mi hijo.

Ladeó la cabeza, apretó su barbilla e imito las expresiones de su padre. El pequeño encontraba demasiado fascinante como alguien tan amable como su papá podía a veces dar tanto miedo.

—Mmm... mamá mi hijo, tú nieto. No necesita de nadie más que a mí. Si él me pide que le consiga un padre me lo pensaré, pero por el momento nada de eso ha pasado. Es muy feliz.

—¿Y tú eres feliz? —La voz del hombre le puso los bellos de punta. —Hijo, siempre quisiste encontrar a tu destinado. ¿Ya dejaste de lado ese sueño?

—Madre, hablemos de eso en otra ocasión.

El omega corto la llamada, su pequeño camino con los brazos extendidos hacia él.

Do Kyungsoo veinte años, padre soltero, sin enlace, sin alfa. Al menos con salud y trabajo.