Capitulo 32

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Después de la discusión que tuvieron hace unos días, Izuku a ido a ver a Daisy todos los días, lo cual te molestaba mucho, Daisy ya se estaba encariñando con la pequeña y ella también se encariñaba. Sería algo duro para los dos tener que separarse y mas para Izuku, así que aprovecharía todo el tiempo que te quedes para pasar tiempo con su hija. 

Hace poco Izuku le contó lo sucedido a Mina, así que para hablar con mas tranquilidad, se citaron en un lugar. 


Izuku: Mina! que bueno que llegaste. 

Mina: hola Izuku! dime, que necesitas? 

Izuku: bueno, como te dije, T/n vino a Japón junto con mi hija, pero, hace unos días tuvimos una discusión ella y yo, el problema es que, cuando T/n se vaya del país otra vez, yo voy a perderlas y sobre todo perderé la potestad de mi hija! 

Mina: porque dices eso? ella te la quiere quitar de alguna manera? 

Izuku: podría decirse que si, en el momento que se vayan, ella le quitará mi apellido a Daisy y yo dejaré de ser su padre. 

Mina: ella no puede hacer eso! Ella es tu hija! 

Izuku: supongo que no tengo otra opción... -baja la cabeza a punto de llorar- . 

Mina: uy! es que cuando la vea, voy a jalarle las greñas! -mira a Izuku totalmente deprimido-. Izuku.... tu eres el padre de Daisy, tu debes pelear por ella por que al ser su padre biológico tienes todo el derecho sobre ella.

Izuku: te refieres a separar a Daisy de su mamá? 

Mina: mira, se que suena malvado de mi parte, pero ella es la que te la ha querido quitar durante todo este tiempo, es solo de ir a un juez y explicarle lo que está pasando. 


Izuku se quedó pensando en lo que dijo Mina, ¿enserio, Izuku sería capaz de quitarte a tu propia hija? pues.... No. Lo pensó por un segundo, pero no accedió a llamar a un juez, aunque le doliera, iba a tener que dejar ir lo que tanto amaba en el mundo, te perdería de nuevo y perdería a Daisy, no tenía de otra que respetar tu decisión. 

Una tarde, Izuku llego a tu casa, y no precisamente para ver a Daisy, esta vez iba a hablar contigo. 


Izuku: hola T/n... 

T/n: Izuku... Vienes a ver a Daisy supongo. 

Izuku: no. Y-yo, vine a hablar contigo. 

T/n: Izuku... También tengo que hablar contigo de algo urgente. 


Cuando dijiste lo ultimo, Izuku puso una cara de asustado, no quería saber que se vendría ahora que estaba mas que destrozado. 


Izuku: bien, dime que pasa. 

T/n: dime tu lo que ibas a decirme... 

Izuku: esta bien. Mira, estoy de acuerdo contigo, si quieres quitarme el derecho de ver a Daisy lo voy a entender, y-yo debí impedir que te fueras ese día, debimos aclarar las cosas, pero no fue así -su voz empezó a sonar quebradiza, agarro tus manos viéndose a los ojos- escucha, T/n, tu no tienes la culpa de nada, nadie tiene la culpa de esto, mas bien, fue un gran privilegio que el destino nos haya juntado para formar una familia, pero también nos lo quitó. No puedo comprender porque no quieres que vea a Daisy y quedarme a su lado, pero si esa es tu decisión, la voy a respetar -baja la cabeza aun agarrando tus manos-.

T/N: Izuku.... Ella ya lo sabe...  

Izuku: eh? -voltea a verla de inmediato con los ojos llorosos- a que te refieres? 

T/n: hoy en la mañana hablé con Momo de lo que estaba pasando, pensé que ella y yo estábamos solas en la casa ya que creí que Daisy estaba en su habitación jugando o en el jardín pero no fue así, ella lo escuchó todo y... Ya sabe que eres su verdadero padre, no me esperé que se enteraría de esta manera. 

Izuku: lo dices en serio? e-ella ya lo sabe? 

T/N: s-si, así que ya no tenemos que ocultarlo más, lo único que nos queda es hablar con ella, te parece? - Le regalas una sonrisa, a lo que él sonríe de igual manera y deciden los dos entrar a la casa- 


continuara. 



 

Olvídate de mi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora