Olvídate de mi.

Capítulo 36

Izuku llegó a tu residencia, tocó el timbre y fuiste a recibirlo.

Tn: Izuku...

Izuku: Hola, Tn. Qué gusto verte.

Tn: Pasa adelante. -Te retiraste de la entrada dirigiéndote a la sala, y el peliverde siguió tu paso hacia allí.

Izuku: Sé que estás molesta conmigo, pero tengo una explicación válida por no haber estado con Daisy durante varias semanas. -Fue interrumpido.

Tn: El problema no es que te ausentes. Mira, ambos acordamos cuidar a Daisy. Te he llamado repetidamente, pero no respondes. Justo hoy, que fue el primer día de escuela para Daisy, te llamé para avisarte que no podía recogerla y que fueras tú, pero no contestaste.

Izuku: Lo sé, perdón. En serio, no he podido venir en semanas. Mi trabajo como héroe profesional me está consumiendo, en serio.

Tn: 💭Lo sabía, debí hacerlo desde un principio.💭 -Dijo en su mente- De acuerdo, lo entiendo. Yo también tengo mucho trabajo. Si te parece, podemos contratar a alguien que cuide de Daisy.

Izuku: ¿Y qué hay de Momo?

Tn: Ella no puede; tiene mucho trabajo que hacer.

Izuku: De acuerdo. Mira, yo me desocupo por las tardes algunas veces. ¿Aún recuerdas a Mina?

Tn: Sí, ¿qué hay de ella?

Izuku: Puedo pedirle que cuide de Daisy mientras nos desocupamos. Es madre de dos niños y es muy confiable. Podemos solicitarle que nos cuide a Daisy.

Tn: Me parece bien. Y si no puede...

Izuku: Te tomaré la palabra de contratar a una niñera.

Tn: Vale. -Le regalaste una sonrisa; él hizo lo mismo.

Izuku: ¿Dónde está ella ahora?

Tn: ¿Daisy? En su habitación. Debe estar haciendo los deberes. Puedes acompañarla si gustas.

Izuku: Gracias. Así podré pasar un tiempo con ella y reponer el tiempo perdido.

Izuku se dirige a la habitación de Daisy, la encuentra sentada en su pequeño escritorio haciendo dibujos. Antes de entrar completamente, toca la puerta desde afuera. Daisy voltea emocionada al ver a Izuku parado en la puerta de su habitación.

Daisy: ¡Papá! -Se levanta rápidamente y lo abraza.

Izuku: Hola, linda. -La carga- ¿Cómo has estado?

Daisy: ¡Bien! Siempre me porto bien. ¿Por qué no habías venido?

Izuku: Tuve mucho que hacer.

Daisy: Mamá me dijo que peleaste contra unos villanos para protegernos. ¿Es verdad?

Izuku: Claro que es verdad. Estoy aquí para que no lastimen a la niña más linda de este mundo. -La eleva por los aires, haciendo que Daisy ría y sonría. Desde la puerta de la habitación de Daisy, observas con una sonrisa cómo ambos son tan felices. Ver a las dos personas más importantes en tu vida tan contentas te llena de alegría. Por un momento, imaginas una vida entera junto a Deku, vivir juntos y cuidar de Daisy.

Izuku dejó de expresar sus sentimientos hacia ti, centrándose exclusivamente en Daisy. Surgió la preocupación de que sus visitas se limitaran a una responsabilidad, algo que, desde hace tiempo, no deseabas para él. Así que, al comunicarle la noticia del embarazo, tu intención era transmitirle tu deseo de un futuro próspero sin tu implicación. Sin embargo, la realidad era diferente. Desde su juventud, Izuku anhelaba formar una familia en el futuro, aunque no de manera tan repentina. Él encontraba felicidad tanto al lado de Daisy como, aunque no lo admitiera, a tu lado.

Continuará.