Olvídate de mi.

Capítulo 35.

En la tarde, tras la salida escolar, Daisy aguardaba ser recogida por alguno de sus responsables. A medida que el tiempo transcurría, y al encontrarse entre las últimas en el jardín, las maestras expresaban su molestia por la ausencia de quienes debían recoger a la niña. Finalmente, tú llegaste.

Tn: Lamento la tardanza, busco a Daisy.

La maestra, algo molesta, la llamó por su nombre.

Maestra: Daisy, ya vinieron por ti

Al verte, la pequeña corrió hacia ti, abrazándote.

Daisy: Mamá!

Tn: Hola amor. -La cargaste en tus brazos- Gracias y lamento la demora, señorita.

Maestra: No se preocupe. La próxima vez, venga más temprano.

Tn: Lo haré.

Bajaste a Daisy, y juntas se dirigieron a casa.

Daisy: Mami, ¿por qué tardaste tanto?

Tn: Lo siento mucho, cariño. Tuve que venir a esta hora porque no pude convencer a mi jefe de ir a recogerte.

Daisy: Ese señor es malo.

Tn: No lo es, cariño. Hoy hubo mucho trabajo, estaba a cargo de un proyecto grande. Lamento tanto la demora.

Daisy: No te preocupes, mami...

Continuaron su camino.

Daisy: ¿Por qué el joven Midoriya no fue a recogerme?

Tn: 💭buena pregunta, Daisy 😒💭 Bueno, es posible que esté muy ocupado.

Daisy: ¿Tanto? Hace días que no viene a verme...

Tn: Recuerda que él es un héroe y tiene la responsabilidad de derrotar a los malhechores para protegernos.

Daisy: Tienes razón, mami. Papá me quiere mucho.

Tn: Así es, y no querrá verte en manos de un villano.

Daisy: ¡Quiero ser una heroína cuando sea mayor, como él!

Tn: Claro que sí.

Tu corazón se llenó de alegría al escuchar a Daisy llamarlo "Papá", a pesar de que a veces ella podría referirse a Izuku como "joven Midoriya". Sin embargo, las dudas sobre el paradero de Izuku compartidas por Daisy también resonaban en ti. Llegaste a pensar que tal vez él los había olvidado y los dejó a su suerte. Aunque no te molestaba asumir la responsabilidad de cuidar a Daisy y ocuparte de tus responsabilidades laborales por cuenta propia, la frustración se apoderaba de ti al pensar en ese joven de cabello verde.

...

Estabas considerando la posibilidad de contratar a una niñera para el cuidado de Daisy cuando, precisamente en el momento en que tomabas el teléfono para hacer la llamada, este sonó en tus manos. La llamada te resultó molesta al ver el nombre en la pantalla, y contestaste con desinterés.

Tn: Izuku...

Izuku: ¡Hola! Her... digo, Tn, ¿cómo has estado?

Tn: La pregunta aquí es ¿dónde has estado?

Izuku: ¡Oh! ¿Estás molesta?

Tn: No, pero hace días que no apareces.

Izuku: Y tú, durante tres años atrás, no te apareciste hasta ahora.

Tn: Deku... -gruñiste levemente-

Izuku: Tranquila, tranquila. Voy para tu casa y te explicaré todo. ¿Está bien?

Tn: Está bien.

Izuku: Oye, ¿y no quieres...

Justo cuando iba a decir la última palabra, colgaste la llamada. Esperaste aproximadamente una hora hasta que, finalmente, el chico de cabello verde tocó a tu puerta.

Continuará.