𝙀𝙨𝙥𝙤𝙨𝙤 𝙙𝙚 𝙢𝙚𝙣𝙩𝙞𝙧𝙖 - Yoonmin

02.

El sol comenzó a iluminar suavemente la playa en las primeras horas de la mañana. Las olas susurraban contra la orilla, y el aire fresco acariciaba la piel de Yoongi y Taehyung, que habían pasado la noche juntos, compartiendo momentos de deseo, placer y caricias bajo el manto de estrellas.

— Hace mucho tiempo que no dormía en la playa. —dijo Yoongi, con una sonrisa satisfecha mientras contemplaba el cielo despejado.— Y tampoco había pasado una noche tan espectacular en mucho tiempo.

Ambos estaban echados en la arena, cara a cara, sus cuerpos aún cercanos y sus miradas conectadas como si no quisieran que terminara.

— Yo también lo pasé bien. —respondió Taehyung con una sonrisa suave, su cabello despeinado dándole un toque encantador.— Eres muy interesante, Min Yoongi. Y siento que... esto podría ser algo real, ¿no crees?

Yoongi asintió lentamente, manteniendo la mirada fija en los ojos de Taehyung, sintiendo que lo que habían compartido iba más allá de una simple atracción física.

— Es cierto que hay algo especial entre nosotros. —admitió Yoongi con sinceridad.

Taehyung, aunque aún sonriente, comenzó a recoger su ropa, sacudiendo la arena que se había adherido a ella.— Tengo que irme, necesito estar en el trabajo pronto. —dijo con una leve expresión de pesar.— Pero... podrías darme tu número. Tal vez podamos tener una cita real otro día.

Yoongi rio suavemente al escuchar la propuesta. Había algo en la forma despreocupada y honesta de Taehyung que lo desarmaba.— En realidad, estaba pensando en invitarte a desayunar ahora mismo. —dijo, juguetón.

Taehyung hizo un leve puchero, claramente tentado por la idea, pero luego suspiró.— Puede ser la próxima vez. —prometió, comenzando a arreglarse la ropa.— Estoy bastante tarde ya.

Yoongi, todavía tendido, le lanzó una mirada despreocupada.— Bueno, entonces saca mi tarjeta de mi bolsillo y pásamela, por favor. —le pidió mientras se acomodaba en la arena.

El omega comenzó a rebuscar en los pantalones de Yoongi, sus dedos buscando la cartera en los bolsillos delanteros. Sin embargo, su sonrisa se desvaneció de repente al sacar algo que no esperaba, un anillo de matrimonio.

Taehyung, aún de pie, miró el anillo como si fuera una ofensa directa.— ¿Qué es esto? —preguntó, su tono cambiando abruptamente, su expresión de incredulidad mientras giraba hacia Yoongi, sosteniendo el anillo frente a él.

Yoongi lo miró por un segundo, la confusión cruzando brevemente su rostro antes de darse cuenta de lo que tenía en las manos.

— ¿Un círculo? —respondió con nerviosismo, intentando hacer una broma que no aterrizó bien.

Taehyung dejó caer los pantalones al suelo, su rostro volviéndose más serio, casi dolido.— ¿¡Estás casado!? —exclamó, dando un paso atrás.— No lo puedo creer... Me he metido en una relación con alguien casado. ¡Dios, qué estúpido soy!

Yoongi se levantó rápidamente, comenzando a cambiarse apresuradamente, tratando de buscar las palabras adecuadas antes de que Taehyung sacara conclusiones erróneas.

— No, no es lo que piensas. —dijo apresuradamente, mientras se abrochaba los pantalones.

— ¿No es lo que pienso? —replicó Taehyung, su tono cada vez más incrédulo y frustrado.— Es un anillo de bodas, Yoongi. ¡Estás casado!

— Sí, lo es, pero... —Yoongi se detuvo por un momento, buscando las palabras.— No es lo que parece.

— Entonces explícame. —dijo Taehyung, cruzando los brazos, esperando una respuesta que justificara lo que acababa de encontrar.