•Capitulo 7•

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Las realidades del mundo me afectaban
Como visiones,y como visiones solamente
Mientras que los locos pensamientos
De la tierra de los sueños
Se conviertan a su turno
No en el alimento de mi vida
Diaria,sino en mi vida
Misma.

                                          -Edgar Allan Poe-

           Hora: 4333 Antes de la hora
                              Cero

Desesperación

El sentimiento de la desesperación

Según Google la desesperación es sinónimo de perder la paciencia en una situación dada .

Pero más allá el sentimiento de estar desesperado, es también sentír la agonía de no poder hacer nada para cambiar lo que está a punto de pasar.

Dan-i se sentía desesperada al ver como todas esas mujeres eran subastadas a los hombres Ricos, una por una. Y no solo mujeres, los niños también eran subastados.

Cada mujer tenía un número en su vestido. Cuando la tocaban subastar la llamaban por ese número y empezaban las apuestas a ver quién daba más por esa chica llena de temor.

De diecisiete mujer solo quedan dos. Dan-i y la chica peli negra.

Ambas se tomaron de la mano.

— ¡Hey! No me dijiste tú nombre— sonrió Dan-i. Ambas estaban llorando.— El mio es Dan-i, Cha Dan-i —

La contraria sonrió —El mio es Lee Nina—

Minho volteo y sonrió a ver a ambas

—421— Los hombres de máscara se acercaron y tomaron a Nina por el brazo.

—Adios— se despidió ella llorando. Dan-i sentía miedo ella sería la siguiente.

— Miren a esta hermosa pieza— Todos los hombres del público la miraban como un perro mira a la carne. Con deseo de comérsela. — ¿Quien da más?, Empecemos con 4 mil dólares — Minho se sentía poderoso y el lo sabía — 16,789, 46 ¿Quien da más?— El solo sonreí — 10 mil dólares— Todo el mundo se quería llevar  ese premio— 15 mil dólares —

Un hombre del público se levantó — Un millón de dólares por ambas— saco un maletín lleno de dinero.

—¿Por ambas ?— Minho y todo el mundo estaba confundido

—Si quieres doy más, pero me interesa la que tiene el número cero— Dan-i era la quien tenía ese número y sintió náuseas al escuchar eso .

Ella se estaba preparando mentalmente porque sabía que alguien la compraría. Pero ella prefería morir antes de ser comprada por alguien. Pero sin más se levantó.

— Ella no está en subasta — sentenció Minho con un carácter fuerte.

Era raro, porque en toda la subastas había estado muy feliz y contento, disfrutando el sufrimiento de las demás mujeres.

— Vamos Minho, ¿Cuanto quieres? ¿10? ¿20 millones?.—

Minho suspiro con pesadez. El hombre de la máscara negra agarro a Dan-i e hizo que se volviera a sentar. Y este estaba a su lado.

Nina. No sabía que hacer.

— Bueno, vamos a hacer un remate. 15 mil dólares por ella— Señaló a Nina. Ningún hombre decía nada.

— Minho, última oferta 50 millones de dólares Ya tienes muchas mosas en casa¿Para que otra?—

Minho se pasó la mano por su cabello. Lucia desesperado.

— No está en venta — volvió a responder.

Dan-i estaba más preocupada. Entonces a ella ya la habían vendido a otro mayor postor.

—Bueno ofrezco 15 Mil para la 421— Hablo otro señor.

— Vendida— Sonrió Minho.

Pero eso no bastó para que el otro hombre quedará satisfecho.

— Pueden ir a recepción a Pagar— Dicho esto todos salieron y las mujeres que ya estaban subastadas también. Solo quedaron los dos hombres de máscara. Minho y Dan-i.

Minho se acercó a Dan-i y la tomó de las manos. Sonrió y la miró a los ojos, está solo estaba confundida.

— Vamos Minho te puedo dar lo que
quieras — Volvió a hablar aquel hombre.

Minho lo miro e hizo una seña, Yuta tomo a Dan-i y la saco del escenario.

—¿Que-que está pasando?— Yuta solo caminaba, ella nesecitaba respuestas. Así que dejó de caminar — ¡ Yuta, nesecito saber carajo! ¡ ESTOY SECUESTRADA!—

Y un disparo se escucho.

—¿ Que acaba de pasar?—

Yuta volteo y se quitó la máscara — Mira lo siento si. Se que no es fácil por lo que estás pasando — Se veía que estaba cansado. Tenía muchas ojeras.

— No claro que no es fácil estoy secuestrada
¡Carajo!— Sus lágrimas empezaron a salir estaba frustrada — Allí afuera estoy sola. Mi abuela está muerta, un hombre me trató de violar además me vendieron y no se porque y el chico que me gustaba está atrás de todo esto. ¡Estoy jodida carajo!—

Yuta quedó sorprendido por la confección de la chica.

Ella gustaba de el. Este se acercó y la miró a los ojos.

— Yo te protegeré, te lo prometo — Ambos se miraban a los ojos. Dan- i sonrió con desesperación.

— No lo nesecito cínico, Yo me protegeré sola, Solo dime por una maldita vez ¿Quien me compró?—

Y otra persona se unió a la conversación.

— Yo soy Quién te compro — Minho venía limpiando un arma. Miró a la chica y está quedo atonita. Por otro lado Yuta. Se volvió a colocar la máscara. — Eres mia, Tu eres mia— La tomo por la cintura, Dan-i lo miraba con atención. Y este le sonrió.

Miró a Yuta y le sonrió — Ya no nesecito nada de ti. Hermano — Le dio una palmadita en la espalda y se llevó a Dan-i.

Tu cuerpo es Mio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora