CAPITULO 21

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Los semanas pasaban como días, ya habían pasado cinco lunas llenas y otros lobos de otras regiones llegaron  pero ninguno reclamaba a Azura. Fue en la quinta luna que vi a Hunter pasar por la loba nueva que estaba disponible pero esta vez no se puso al final de la fila. Paso y no podía aguantar la risa en mi interior al ver que ni siquiera la loba nueva bajaba su cabeza por él.

Las cosas iban mejor que nunca, y más cuando Boscha llego a casa desesperada

 – Amity tienes que ayudarme, no sé qué hacer ...Y me estoy volviendo loca – decía y se tiraba al sillón, llevándose las manos en la cabeza. Estábamos en mi despecho solas las dos.

 – me hablas de...

– si, si, si, y mil veces si.... Willow, dios esa mujer me trae por la calle de la amargura, no sé qué hacer

 – pero tú le has dicho que te gusta.- dije sentándome a su lado y ofreciéndole una copa.

 – no... bueno... En palabras no.... Pero es que bueno.... yo no sé cómo, y ella es una loba, y viuda para remate, no quiero que piense...

– ella es especial, Boscha– dije girándome y mirándola a los ojos – ella no quiere un lobo, no lo quiere por qué no quiere ser reclamada por soledad, porque eso es lo que hace un lobo viudo, reclamar una hembra, ella no quiere eso, no quiere la soledad de un lobo, pero unirse con alguien de otra especie es el repudio de tu familia.

 – pero ella no tiene familia, es la alfa de su propia manada, no se puede repudiar a ella misma... o si?

 – no, claro que no se puede repudiar a ella misma, no me seas bruta. – Dije dándole un golpe en la cabeza – ella fue reclamada, digamos que ella sabe lo que es el amor, y eso es lo que quiere ella, un amor, uno que venga de corazón, no de la luna, o de la soledad.

– o sea que debo de enamorarla poco a poco...

....

Y vaya que no fue poco a poco, casi la tengo que arrestar por acoso y arrasar  tiendas. Flores , chocolates, ositos de peluches  y dios siempre paraba en el super mercado. Solo compraba dos artículos de los quince que ella necesitaba porque así tenia la escusa de ir hasta seis veces al supermercado  para verla y hablar con ella.

Hasta tuve que hablar con Willow para decirle que no era una demente, que lo único que estaba intentando hacer la Peli rosa es conquistarla pero como Boscha no lo había hecho nunca, se limitaba a hacer lo mismo que en esas películas empalagosas y malas.

– de verdad saca todas esas ideas de ahí – dijo Willow con una sonrisa mirando el sofá de su casa con una docena de peluches y varios floreros con flores repartidos por todo el salón.

 – no te rías de ella, ella me pide consejo y bueno que le puedo decir. Jamás me he enamorado y para una vez que lo hago fíjate tú, no es que sea de muy buena ayuda.

 - la verdad es que es muy tierna a su manera... pero Amity ...nosé como decirlo, ella es una mujer...

 – una mujer como yo- la interrumpí, pues muy pocas personas sabía de mi condición, Azura sabía sobre Boscha pero digamos que Bo, no era muy fan de comentarlo con otros.

– como tu.... Tu, tu, tu- dijo y me señalo la entrepierna, y me puse más roja que una fresa.

 – pues sí, pero ella si no lo dice es porque...

 – se siente insegura, y piensa que la puedo rechazar.

 – no es fácil ser el bicho raro, y ser la nueva en el vecindario. Y si le sumas que te enamoras de una loba, que es lo más complicado de las especies, que es viuda, y mi amiga, pues un lio muy gordo de pelotas gigante.

TE ESTABA ESPERANDO (ADPATACIÓN LUMITY) -  (G!¡P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora