Capitulo 22: Desastre en Estigia

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¿Hemos conseguido algo? - preguntó el anciano sentado en él sofá.
Si, maestro- dijo la figura delgada de ojos negros y expresión sería, que tenía en frente-Tenemos varias piezas de la extraña tecnología de los... no sabía cómo continuar, no encontraba la palabra exacta.
El anciano dibujó una mueca que parecía una sonrisa, antes de hablar.
No tengas dudas en decir lo que son - dijo el anciano con voz profunda - No son como nosotros- continuó diciendo con repugnancia -no siguen la luz del emperador y se relacionan con razas inferiores, los ven como iguales y eso es lo peor de todo.
Sila asintió y vio el fuego en los ojos de su señor y sintió miedo, sabía de la furia que sentía el inquisidor contra todo lo que no fuera humano y contra aquellos que no lucharan por erradicar a cada Xeno de la galaxia.
Sila iba a decir algo, pero no alcanzo, la mano del inquisidor se levanto y el guardo silencio.
Pon a recaudo cada pieza Xenos que conseguimos, las llevaremos con nosotros, es hora de abandonar este planeta.

Sila lo miro sin entender el porqué se irían si estaban los Xenos aún, pensó en solo obedecer, pero decidió no callar.
Por qué motivo nos vamos si los Xenos aún están en el planeta y si nos vamos seguirán esparciendo su blasfema influencia sobre esta gente y pueden quedarse con el planeta o el sistema entero- dijo Sila a su maestro.

El viejo suspiro y miro a Sila- eres tan joven y te falta tanto aún le dijo, lo que para mi es evidente se escapa de tu vista.
Sila iba a contestar, pero el inquisidor lo hizo callar.
Te diré el porqué - dijo el viejo- Nos vamos porque este mundo ya está perdido, el sistema está perdido. Miro los ojos abiertos como platos de su discípulo- este mundo está corrompido por el caos y quizás el sistema completo, los Xenos solo retrasaron lo inevitable y nosotros aprovechamos ese momento para, conocerlos y entender un poco de su cultura y ver si su tecnología es rival para las fuerzas imperiales. Este sistema estará en manos del caos y morirá o estará enfrentado a muchos años de larga guerra de futuro incierto o será purgado por un exterminatus.
Sila se dio cuenta que su maestro había  pronunciando la palabra exterminatus de una forma particular y se giró hacia su derecha mientras la pronunciaba, clavando sus ojos en la oscuridad que cubría una esquina de la habitación.
Luego Dorian continuó hablando mirando a la oscuridad bajo la mirada desconcertada de Sila- ¿No es así inquisidor?
La oscuridad comenzó a doblarse y retorcerse como si de agua negra se tratara y desde ese lugar surgió una figura apoyada en un largo bastón con un águila en la punta. A medida que se hacía visible Sila pudo ver que ese hombre llevaba una servo armadura ricamente adornada con símbolos del Hordo hereticus.
Vaya es impresionante que pudiera descubrirme inquisidor Dorian- dijo el hombre.
Te descubrí hace días - respondió Dorian esbozando lo que parecía ser una sonrisa.
Soy el inquisidor Atos del hordo hereticus y no te equivocas, este planeta ya está perdido está corrompido hasta los cimientos por los poderes ruinosos y ahora por esos Xenos y debe ser purgado- dijo Atos manteniendo su postura relajada pero alerta.
También abandona el planeta inquisidor- dijo Dorian, más como una afirmación que como una pregunta.
Exactamente inquisidor Dorian- respondió Atos -debo ver los detalles, para purgar este mundo. Y con su permiso me retiro.
Atos camino y salió de la habitación mientras era observado por Dorian y Sila.

Almirante tenemos comunicación entrante de la FUG, esta encriptada nivel Alfa- dijo el oficial de comunicaciones de la nave insignia.
Diomedes se estremeció, sabía que el nivel de encriptado revelaba la importancia del mensaje y Alfa era el nivel más alto de encriptado, le seguían Beta, Gama y Épsilon. La mayoría de los mensajes eran Épsilon incluso los mensajes importantes sólo llegaban a Beta. El nivel Alfa estaba reservado para situaciones verdaderamente extraordinarias.
Pásalo a mi consola - dijo Diomedes al oficial de comunicaciones.
Si, señor - dijo esté mostrándose realmente nervioso.
Diomedes usó su mano para que la seguridad leyera su firma biométrica y revelara el mensaje.
Una voz familiar retumbó en los oídos de Diomedes.
"Soy el regente Kamil Cortez de la FUG, a todas las flotas expedicionarias se le ordena su regreso inmediato a territorio de la Federación. Todas las misiones están canceladas de manera inmediata al recibir este mensaje. La prioridad de este mensaje es Alfa, repito prioridad Alfa".

Camino a la desolaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora