—¡Que vivan los novios!—celebró Kankuro, Makio era oficialmente su cuñada.
Toda la aldea estaba celebrando el compromiso del Kazekage, asistieron los demás Kages, y amigos de fuera de los novios.Todos la estaban pasando muy bien, y sin hablar de Makio que no dejaba de sonreír, esa sonrisa que irradiaba felicidad, y era lo único que le bastaba a Gaara, verla feliz.
—Ahora en adelante no podrás deshacerte de mí—bromeó su esposa
—Siempre te querré a mi lado—contestó su esposo antes de atraparla en un beso.
Después de la fiesta, ambos se dirigieron a su nuevo hogar, anteriormente habían dejado sus pertenencias, pero no habían tenido el tiempo de desempacar.
Antes de ponerse cómodos, Makio estuvo dándole vuelta a unas cajas en busca de un cuadro, al encontrarlo, lo colocó en una de las repisas, era una foto de ella con Gaara, su primera fotografía juntos.
—¿Qué te parece?
—En cualquier lugar se verá bonito—dijo mientras abrazaba por la espalda a su esposa, y descansaba su cabeza en uno de sus hombros.
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—¿Perdiste una marioneta?
—No, no, es solo que no recuerdo en que parte de la casa la puse—respondió su hermano
—Entonces la perdiste en la casa—concluyó el pelirojo
—Esta en la casa, fue de las últimas marionetas que use
Kankuro daba vueltas por toda la oficina mientras que Gaara intentaba trabajar y Makio estaba sentada en el sofá, revisando unos informes.
—Será mejor que busques tu marioneta
—¿Enserio?—pregunto y su hermano asintió—Nos vemos Gaara, adiós Makio—se despidió antes de salir
—¿Ahora me dirás que pasa?—pregunto el pelirojo
—¿De qué hablas?—no podía negar que su esposo la conocía de pies a cabeza
—Makio—llamo—Llevas 15 minutos leyendo el mismo papel—señaló—Además que cada vez que pasa algo arrugas el entrecejo—añadió
—¿Qué? Yo no hago eso—nego rapidamente, pero inconscientemente lo hizo
—Así como ahora
—Solo estaba sacando cuentas—murmuró
—¿Cuentas?
—De cuánto tiempo llevamos casados
—Un año, ¿no?—pregunto dudoso, o mejor dicho, un tanto preocupado de haber olvidado alguna fecha importante.
—Exacto, con el embarazo de Temari me puse a pensar y todos los meses ha llegado mi periodo menstrual
—¿Te preocupa que no llegue tu periodo?—pregunto confundido
—Me preocupa que venga, ¿no crees que ya hubiera dado señales de un embarazo?—expone su preocupación
—No te presiones, tenemos todo el tiempo para seguir intentándolo
—Lo se, pero no dejo de pensar si estará pasando algo con mi cuerpo
Gaara se levantó de su asiento, acercándose hasta su esposa que lo miraba confundida por su acción.
—Vamos al hospital—propuso—Haremos que te examinen, y saldremos de dudas
—Pero ¿y tu trabajo?
