—¿Podrías alcanzarme aquellos informes?—pidió el Kazekage a su esposa, que se había quedado trabajando con el
Unos pasos se escucharon a distancia, alguien venía corriendo.
—¡Hana, regreso!—aviso Kankuro, que abrió la puerta de golpe
—¿Tan pronto?—preguntó Makio extrañada, se supone que volverían hasta mañana.
El equipo de Hana que estaba conformado por: Yodo, Araya y Shinki, había partido esa misma mañana en una misión, en la cual no volverían hasta el día siguiente.
Por el rostro de Kankuro, no eran buenas noticias.
—Hana fue encontrada inconsciente en la entrada de la aldea, está en el hospital, pero los chicos no venían con ella...
—No puede ser...—murmuró la pelicafe preocupada.
Hana, una de sus amigas desde la infancia, que estaba luchando por su vida en el hospital.
Shinki, el pequeñin que le concedió su deseo de ser madre, desaparecido.
Yodo y Araya, además de ser los amigos y compañeros de su hijo, les había tomado el cariño como dos hijos más, que los vio crecer y formarse en grandes ninjas.
El equipo había recibido la misión de escoltar a un mercader hacia su aldea natal, ¿que pudo salir mal?
No lo sabemos.
Solo debian escoltar al mercader, y volverían al día siguiente, fácil, ¿no?
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La luna estaba por salir, necesitaban que Hana despertara cuanto antes para saber lo que sucedió y buscar a los chicos.
—¡Perdóname Makio, intente protegerlos, pero eran demasiados y yo...fracase!—al despertar, lo primero que pidió fue hablar con su amiga, con sus últimas fuerzas hizo el intento de levantarse de la camilla, con la intención de ir a buscar a su equipo.
—Hana, aun sigues delicada—Makio la detuvo—Entiendo como te sientes, no es tu culpa, hiciste lo mejor que pudiste, ahora nosotros nos encargaremos, pero necesito que me cuentes que paso
—Escoltamos al señor Moshimoto—el mercader—Nos detuvimos a descansar cerca de un río, Yodo fue por un poco de agua, pero tardó en volver y cuando íbamos a buscarla fuimos cegados por unas bombas de humo que salieron de la nada, comenzó una pelea entre el humo, pude detectar como a seis atacantes, intente protegerlos a todos, pero uno de ellos apareció con Yodo inconsciente entre los brazos, baje la guardia y me inyectaron algo que me dejó inconsciente a los pocos minutos...
—Te inyectaron el mismo veneno que a mi hace algunos años, pero gracias al antídoto que creo Sakura lograron atenderte de inmediato—comentó Kankuro—Aunque los efectos fueron menores, porque fuiste capaz de volver a la aldea, lo que significa que debe ser una copia—añadió
—¿Tuviste problemas para volver?—indago el pelirojo
—No se cuanto tiempo pasó desde que me desmaye, pero no había nadie, intente buscarlos, pero me sentía demasiado débil y lo unico que pense fue en regresar y pedir refuerzos, pero cuando llegue a la aldea no soporte mas y volví a desmayarme
Makio se quedó un momento a solas con Hana, mientras Gaara la esperaba fuera de la habitación, minutos antes había mandado a su hermano a corroborar una información, que podría darle una pista de los atacantes.
—Lo tengo, Riku Kazotora, especializado en marionetas, Miku Amanaka, especializada en artes ninja con naturaleza viento y Kazu Oshiro, ex-anbu, están en el libro bingo, pero no hay mucha información sobre sus tecnicas—-conto—Aunque hay algo que no entiendo—mencionó
—¿Por que atacar a un mercader común y corriente?—dedujo su hermano
—Si, no poseía nada de valor, era una misión de rango bajo
—El mercader no era el objetivo, era Shinki—casi pudo afirmar aquello, después de unir algunos cabos sueltos.
El mercader pudo llegar por sí solo a la aldea.
Él mismo había seleccionado al equipo de Hana, pudo averiguar desde antes en que equipo estaba Shinki.
La misión fue categorizada de rango bajo, porque él mismo explicó que solo era por seguridad, porque de haber sido por otra razón más grave, se hubiera mandado a un equipo de Chunin o Jonin.
—Prepara tus marionetas, nos vemos en la entrada de la aldea—ordenó el pelirojo.
—¿Qué? ¿Ahora? ¿No quieres que se aliste otro escuadrón por si se complica?
—No estarán a tiempo, no podemos perder tiempo, comunicale a Baki lo sucedido y que estará a cargo hasta nuestro regreso—pidió—Una cosa más, nada de esto a Makio, han sido suficientes preocupaciones para ella, después de que se quede dormida partiremos—aviso
—¿Sabes lo que me hará cuando se entere?—Makio podía ser una chica muy sonriente y simpática, han sido pocos los que la han visto realmente molesta.
Kankuro sabe por experiencia.
—Será después de que los rescatemos por lo menos—fue el único consuelo que le pudo dar su hermano menor.
Tal y como habían quedado, al asegurarse que Makio estuviera profundamente dormida, su esposo salió sigilosamente de su hogar, para encontrarse con su hermano en la entrada de la aldea.
—¿Tienes todo listo?—quiso corroborar su hermano antes de partir.
—Mis marionetas están más que...
—¿Enserio pensaban irse a escondidas?—Makio había aparecido a sus espaldas, Kankuro pegó un brinco y contuvo un grito.
—Creí que estabas dormida—contestó su esposo
—Lo mismo pensé yo, hasta que vi que tomabas tu calabaza y salias de la habitación—refuto con un tono serio—Yo tambien ire—afirmó, y luego su esposo como cuñado se dieron cuenta de que estaba con su traje y abanico, lista para partir.
—Kankuro y yo nos haremos cargo—respondió
—Ya estoy lista, podemos ir los tres
—No tienes porque preocuparte, nosotros nos haremos cargo y volveremos lo antes posible—Gaara intentaba convencer a su esposa de quedarse en la aldea, de no exponerla a ningún peligro
—No me podre quedar tranquila aqui, ademas quiero rescatar a los chicos
—Makio son peligrosos, no sabemos lo que pueda pasar—intento explicar
—Con más razon deberia ir, ¿por que no quieres que vaya?—preguntó directamente
—Yo creo...que me ire por alla—Kankuro comenzó alejarse sigilosamente, escapando de la pelea.
—Porque no quiero que tus emociones te dominen, te dejes llevar y salgas lastimada—soltó un poco impaciente, el tiempo corría.
—Soy una Jonin experimentada en estos casos—recordó
—Esto es diferente, las emociones por tu hijo pueden nublar tu...
—Pero si también es tu hijo, ¡es nuestro hijo!—explotó—¿Cómo me pides que no me preocupe? estamos hablando de nuestro hijo, y sus amigos de la infancia que también los considero como uno, lo menos que hare sera no preocuparme, así que dejemos esta pelea y vamos, que el tiempo corre—pasó al lado de su esposo—Kankuro, vamos
—¡V-Voy!
No quedaba de otra que dejar de lado la discusión, la prioridad ahora eran los menores, no podían perder el tiempo discutiendo.
Aunque eso implique que durante el camino se sienta un ambiente tenso entre la pareja.
Suerte para Kankuro.
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