Capitulo 7 - "Creo que mi nombre es Oakley Neil Caesa- Su perra"

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Oakley había abandonado la habitación antes de que el sol se pusiera, dejando a Kayla debajo de las sábanas sola, dejando su lugar al lado de ella vacío, ahora que se había ido.

Pasando una mano por su cabello alborotado después de tener sexo, Oakley dejó escapar un suspiro de alivio. Sus nervios estaban tranquilos por el momento durante el poco tiempo que durara tranquilo se sentía a gusto.

Al abrir la puerta de su habitación después de quitarle el seguro, fue entonces cuando vio a Brooklyn durmiendo en el suelo y volvió a la realidad.
Por mucho que ella le molestara y le sacara de quicio, no podía dejar de sentirse como un idiota porque ella le había hecho caso y había acabado durmiendo en el suelo.

Debe de haber sido demasiado incómodo, pensó el mientras suspiraba profundamente y empezaba a caminar hacia ella. Al mirarla, se mordió el interior de la mejilla. Era hermosa, no lo podía negar, pero había algo en ella que hacía que Oakley sintiera ganas de gritar.

Ya fuera porque ella le había pillado en su "mejor" momento (por supuesto esto es sarcasmo) o por la cantidad de barbaridades que habían pasado abajo con Bruce hacía unas horas, sabía que la chica era un problema.

Inclinándose, Oakley tomó el cuerpo de ella con sus brazos, acunándola como si fuera un bebe antes de pararse con la espalda recta y la dejó en su cama perfectamente hecha. Agarrando una manta que estaba cerca, la puso sobre la parte superior de su cuerpo, y la cubrió desde los pies hasta el cuello.

Echando un vistazo por última vez, Oakley se dio la vuelta y salió de la habitación para dirigirse a la planta baja.

Bruce estaba sentado en una silla, comiendo, hecho un vistazo en un instante y una sonrisa se abrió paso entre los labios de Oakley.

-Ey, Bruce- Oakley gritó, asustando un poco a Bruce antes de que se dara cuenta de que solo era él y se calmó.

-Que?- Dijo Bruce seco. El no era una persona muy alegre por la mañana.

Eso le dio mas razones a Oakley para aumentar su ira.

Sin pensarlo dos veces, y sin emitir ningún sonido, Oakley cargó contra Bruce, agarrándolo por el cuello de su camisa, obligándolo a levantarse y dejar la silla detrás de él antes de golpearlo contra la pared detrás de donde se encontraban.

Oakley no dudó mientras ponía su puño hacia atrás y lo chocó contra su mandíbula, recibiendo una mirada de dolor y un gemido de disgusto por parte de Bruce. Tirando su puño hacia atrás, una vez más le golpeó en el estómago al lado de una de sus costillas.
-La próxima vez que te atrevas a ponerme las manos encima- se burló Oakley con disgusto. -Y me amenaces con matarme- se acercó mas a Bruce, con la nariz a un solo centímetro de él. -Ni siquiera tendrás la oportunidad de decir una sola palabra antes de que ponga mis manos sobre ti- Bajó la voz hasta decir un susurro, el veneno salía por cada palabra que pronunciaba.

Empujándolo contra la pared con fuerza, Oakley retrocedió y se alejó, dejando a Bruce lleno de dolor.

Si hay una cosa que odiaba Oakley, era cuando la gente trataba de superarlo, al igual que Bruce lo había intentando ese mismo día.

Sacudiendo su camiseta hacia abajo , Oakley saltó por las escaleras caminando de regreso a su habitación, donde se quito la ropa - Brooklyn seguía durmiendo- y entró al cuarto de baño. En cuanto la ducha estuvo lista, entro en ella dejando que el vapor de agua caliente cubriera su piel.

El agua que se escurría por el cuello y la espalda llevó a Oakley a la serenidad absoluta. Le encantaba tomar duchas largas en la mañana porque le permitía escapar de la realidad solo por un momento, por eso cuando terminaba de lavarse el pelo y tenía que apagar el agua, tenía ganas de volver a la ducha de nuevo.

DANGER || ADAPTADA ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora