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Sus labios se separaron <<pero no su agarre>> para así ambos poder respirar después de un largo rato, se miraron a los ojos y se sonrieron mutuamente.

-Levi...-. La azabache mordió su labio inferior y se animó a preguntar. -¿Qué somos? Es decir... ¿Qué somos ahora?-. Preguntó Mikasa con una risita nerviosa.

El Ackerman pestañeo y también soltó una corta risita para después rodear a la azabache, abrazándola. -Siento que eres una mocosa todavía-. Le dijo.

-Oye-. Le reprochó aún sin separarse de los brazos masculinos.

-Aún así te lo preguntaré, eres muy predecible mocosa... ¿Puedo ser tu novio?-. Le preguntó.

Con sus mejillas sonrojadas y luego de tragar saliva contestó. -Y yo soy la mocosa ¿no? Tch quiero salir contigo... Quiero ser tu novia-. Y sonrió apenada.

Levi se separó y entre sus manos tomó el rostro de ella. -Oye mocosa, ¿en verdad quieres pasar la noche en ese ya apartamento viejo?-.

-¿Puedo pasarla en el tuyo?-. Le preguntó como si nada y como si lo estuviera desafiando.

-Ya lo has hecho antes-.

Mikasa le sonrió triunfante y ligeramente apartó las manos del masculino de su rostro. -No esperes nada nuevo-. Se alejó de él para ir hasta su auto. -Te dejo donde estacionaste tu carro-. Le señaló con la mirada el copiloto para que este subiera.

Antes de llegar al apartamento del masculino pasaron al antiguo departamento de la oji gris por su ropa de dormir, un cambio y entre otras cosas. Una vez llegaron a su destino algo le decía a Levi que por la mente de Mikasa pasaba la posibilidad de dormir en la habitación de huéspedes, y no se equivocaba.

-No tienes que dormir en esa habitación-. Levi carraspeo su garganta algo nervioso. -Es decir... puedes dormir conmigo... no te emociones-.

Mikasa le sonrió y se acercó a él. -Fui yo la que dijo que no esperaras algo nuevo-. Le dio un corto beso en los labios y se introdujo a la habitación. Levi sonrió de lado y la siguió.

La oji gris tomó asiento en el lado izquierdo de la cama, luego de quitarse las sandalias subió los pies a ésta. -Gracias por dejarme quedarme-

-A este punto no hace falta agradecer-. El azabache también tomó su lugar del lado derecho.

-Levi... ¿Qué tienes que hacer mañana?-. Preguntó ella aun sin recostarse por completo.

-No tengo nada preparado por hacer pero tendré que darme una vuelta al hospital solo para revisar unas cosas ¿Porqué preguntas?-

-Quisiera que vinieras conmigo a un lugar-.

-¿Un lugar? ¿Dónde?-.

-Ya lo verás- Le dijo alegre.

Levi la miró y nuevamente la rodeo con sus brazos para acostarse juntos en la cama, la tomó desprevenida y éste al percatarse de la sorpresa de la chica habló. -Quédate así, nos levantaremos más temprano así que quiero dormir de una vez-.

-¿Estas cómodo?-.

-¿No sueles abrazar tu almohada o cobija cuando duermes?... Esto es más cómodo-.

Mikasa rio bajo y se posicionó para también abrazarlo. -Si, lo es-.

El primero en despertarse fue el azabache, ambos aún seguían abrazados, frente a frente y sus narices rozaban; con su índice, acarició el rostro de su novia, sonrió al verla dormir tan tranquila, y posteriormente se levantó, mientras buscaba su ropa, Mikasa despertó, talló sus ojos y estiró sus brazos.

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