Diseñando Secretos [En Curso]

6: "Amigos"

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Priya

- Buenos días, dulzuras. - saludó la profesora Adriana Jones y acto seguido dimos los buenos días - Hoy conocerán a un nuevo compañero de clases. Él llegará en unos segundos, nunca había asistido a una... - paró en seco como si fuera a decir algo que no debía - .... digo, a un aula con tantas personas. -

No quiso meter la pata, pero el error ya estaba hecho. Todos, o la mayoría, entendieron.

- Háganlo sentir como uno más y por favor, no quiero que lo estén molestando siempre. Necesita espacio. -

- ¿Es una persona de nuestra edad o un bebé? - preguntó un atlético chico.

La clase estalló en risitas.

- Ya sabrás por qué digo todo esto Milton Le Brun. Espero que no seas uno de los primeros en ir corriendo hacia él cuando veas de quién se trata. Es una persona normal por lo que necesita de su espacio personal como todos. -

- Adoro su manera de memorizar los nombres y apellidos de todos sus alumnos en tan poco tiempo, profesora Jones. -

- Gracias. Pero a mí no me gustan para nada sus chistes, Le Brun. Así no conseguirá muchas chicas con tan poca labia. - toda la clase volvió a reír.

La puerta resonó en la habitación calmando nuestras risas. A la voz de la profesora la puerta se abrió lentamente, esta estaba bajo las curiosas miradas de todos a la espera del nuevo compañero.

Una esbelta figura apareció, con un abrigo color gris tapando su cabeza con la capucha dejando a la vista unos mechones rubios.

- Buenos días. - miró a todos, y todos se encontraban petrificados.

Quitó la capucha dejando que la luz iluminara su rostro tantas veces visto en revistas y tan conocido en la ciudad y el mundo.

- Este es William Agreste y será vuestro nuevo compañero. -

- ¡Eh, Will! Por aquí. - le llamó Natsh.

Todos sonreían ante este suceso, a pesar de que algunas sonrisas se desvanecieron al presenciar, que al parecer, William era buen amigo de la que todos querían evitar. Y a juzgar por la primera impresión para ellos, él debería ser igual que ella.

- Te he guardado un asiento justo detrás de mí. - no dejaba de acariciarse el pelo y el cuello inconscientemente.

- Guao. ¿Has notado eso? - dijo Amy - ¡Está muerta con William! -

- En un sentido figurado. Si. -

Las clases del primer horario ya habían terminado y era hora del receso. Iba saliendo del salón con Amaranta que se disponía a presentarme con sus amigos, hasta ahora solo conocía a Liam.

Intenté con todas mis fuerzas no mirar a William, y Amy tampoco lo había mirado ni me había mencionado nada sobre él. Comprendió lo que antes le dije a la perfección.

Me encanta él, es lindo, apuesto, alto, rubio, tiene ojos verdes, es completamente mi tipo. Por eso tengo tantas fotos suyas en mi cuarto.

Lo que siento es un simple aprecio, una especie de emoción como cualquier fan, que cuando más podría convertirse sólo en un amor platónico. Quisiera conocerlo, si, pero sólo para hacer una linda amistad. Tengo miedo de como pueda ser su verdadera personalidad. He visto demasiadas películas donde el popular se burla de la más indefensa, que en este caso soy yo, haciéndose pasar por alguien amable. Y si no es posible tener una amistad, me tocará evitarlo todo el maldito tiempo y hacerme la de la idea que nunca lo he visto ni lo voy a ver jamás.