『𝐋𝐚 𝐥𝐮𝐦𝐢è𝐫𝐞』ᴜᴄʜɪʜᴀ ꜱᴀꜱᴜᴋᴇ

【０３】

—Hace demasiado frío—. Maki temblaba aun con una de sus gabardinas más pesadas.

Hinata por el otro lado estaba en la misma situación, abrazando la bufanda recién terminada. Estaban de camino a buscar a Naruto y qué mejor lugar para buscarlo que en Ichiraku.

—Maki-chan, n-no estoy segura de que...

—No, no, no, no me hiciste esperar en el frío para que des la vuelta—. Quería sonar comprensiva pero el frío en su nariz la molestaba.

Llegaron a Ichiraku, Sakura, Naruto y el equipo InoShikaCho estaban allí. Miró con recelo a Shikamaru quien inmediatamente sintió la mirada penetrante de Maki.

—Ya comes lo suficientemente bien en mi casa, quítate y déjame probar ese puerco.

Acto seguido arrastró a Hinata junto a ella, poniéndola junto a Sakura e Ino. Pidió una ración extra de carne y comenzó a comer. Las caras confundidas pasaron desapercibidas.

—Mhm, Hinata deberías probar el puerco está delicioso.

Intentó introducir a Hinata en la conversación, mientras ella tenía una especie de competencia con Chouji sobre comer carne, al mismo tiempo que Ino hablaba sobre flores. Ino era agradable y a veces le gustaba mandar a gente a su florería para tener un bonito adorno en su oficina.

Hinata por el otro lado se esforzaba para entablar una conversación con Naruto, Sakura comprendió rápido la situación e intentó alentarla. Todo fue imposible en el momento que unas fans de Naruto se quisieron unir, la amabilidad desmedida de Naruto hizo que Hinata se quisiera ir.

—Naruto ¡BAKA!

Sakura estaba molesta y trató de asestar un golpe al rubio, pero prefirió ir detrás de la oji-luna. Maki por otro lado se atraganto con la carne y salió corriendo detrás de ellas dos.

—¿Pensabas darle la bufanda, no es así?—Dijo Sakura mirando directamente a la bolsa que tenía en sus brazos.

Maki llegó rápidamente junto a ellas.

—Oh Hina, no estés triste. A veces algunos hombres son algo torpes y no ven las señales que les mandamos.

—Si, pero mira que dejar a una señorita irse sola en la noche no es muy varonil, no importa si Hinata es muy fuerte—. Refuto Sakura con enojo a la situación anterior.

Maki asintió efusivamente—Sakura tiene razón, tienes que ser más directa con Naruto o jamás comprenderá.

Hinata estaba ruborizada, pero Maki y Sakura tenían razón, sus sentimientos no podían llegar al rubio si no era directa.

Después de eso Hinata se retiró sola, la verdosa y rosada insistieron en acompañarla a su casa, Hina declinó y dijo que estaría bien, ambas no dijeron más y la vieron irse.

Maki estaba tan inmersa en sí misma que no noto la incomodidad de Sakura, quien la estaba inspeccionando con la mirada muy fija. Maki por el otro lado pensaba en mucho y nada a la vez.