Jungkook tiene un admirador secreto y cree saber quién es.
¿Alguna vez sentiste ese temor de no ser lo suficientemente bueno para una persona?
Así me siento yo.
Porque tú eres etéreo.
Eres oro.
Eres arte.
-Tu admirador secreto.
Jungkook suspiró.
"He...
AQUÍ te amo. En los oscuros pinos se desenreda el viento. Fosforece la luna sobre las aguas errantes. Andan días iguales persiguiéndose. La luna hace girar su rodaja de sueño. Me miran con tus ojos las estrellas más grandes Y como yo te amo, los pinos en el viento, quieren cantar tu nombre con sus hojas de alambre.
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Era horrible sentirse así.
Quería desaparecer.
Deseaba que aquello ocurriera esa última hora de clases, él sentado en el aula donde tenían el taller de orientación, una mano en su barbilla y su codo en el escritorio anexado a la silla.
Taehyung aspiró profundamente, tratando de expandir sus pulmones lo más que se le permitiera, pero al parecer, sus pulmones no tenían ánimo de cooperar.
Observó a los últimos alumnos que entraron, entre ellos Jimin que se sentó a su lado y Taehyung agradeció tener un amigo como él, capaz de no molestar con preguntas vacías sobre su bienestar y no comentar lo que había pasado con Jungkook.
Su amigo se estiró en su asiento.
"Quiero ir a mi casa" Jimin se quejó. "A dormir la siesta"
Taehyung también se quería ir, pero era porque por primera vez en mucho tiempo tenía el humor por los suelos.
Se sentía despojado de cualquier tipo de sentimiento que no sea la tristeza.
Era incapaz de entender del todo el comportamiento de Jungkook y al mismo tiempo, se sentía tonto por haberse sorprendido por aquella reacción cuando era lo que tanto temía que ocurriera.
Pero quien realmente estaba acurrucado en una de las esquinas de su corazón era su alfa.
Estaba herido, lamiendo los cortes profundos que las afiladas palabras de Jungkook le produjeron, tratando de quitarse el aroma del omega en celo de la punta de la nariz, queriendo olvidar cómo sentía su tacto e intentando tratar de romper ese lazo que los unía.
Allí estaba su alfa, pequeño y dolorido, luchando contra el fuego que él mismo inició.
Taehyung se enderezó cuando la profesora entró en el aula con su maletín de siempre.
"Buenas tardes, chicos" todos le devolvieron el saludo, menos Taehyung. "Hoy vamos a hacer algo distinto, necesito que se pongan de pie, se junten con un compañero y traten de decirle al otro sus compañeros sus propias debilidades y fortalezas y luego ustedes le dirán a sus compañeros las debilidades y fortalezas que ellos tienen"
Un murmullo se extendió por el aula, pero no hubo mucho más porque los estudiantes, aunque no todos se veían de acuerdo con la tarea porque no era algo usual, se pusieron de pie.
Comenzaron a vagar por el lugar, buscando a alguien.
Todos hacían la actividad menos uno, un alfa que permanecía sentado.
