THE WAY I LOVED YOU | taekook

Prologue: Twenty Love Poems

Místico, así se sentía Jungkook.

Supo que jamás se volvería a sentir así porque ya nada sería lo mismo entre ellos.

Como si estuviera flotando en agua pura cuando cayó de bruces a la cama, con los brazos abiertos y arrastrando consigo el cuerpo que lo abraza y caía encima suyo.

El omega sonrió con picardía cuando escuchó el jadeo de satisfacción en su oído proveniente del alfa entre sus piernas y se sintió ahogado en el aroma cítrico que desprendía, mas no quería dejar ir la maravillosa sensación de ser llenado por la parte animal del joven arriba suyo. Por eso, obligado por su propia avaricia, se restregó contra él buscando vestigios de sexualidad que pareció frenar cuando ambos alcanzaron el punto cúlmine del placer; pero Jungkook, siendo el chico obstinado que era, quería más.

Sin embargo, una mano dominante lo sostuvo de la cintura con fuerza, haciéndolo frenar súbitamente y es así que percibió cómo el pene aún dentro suyo se hundió más, pesando contra las paredes de su entrada y arrancándole un quejido de la profundidad de sus entrañas.

Taehyung gruñó ante la insolencia del omega.

"Basta Kook" masculló el joven castaño con índole imperios, pero tono débil y cansado del ejercicio hecho. "Quédate quieto, por favor"

Y Jungkook simplemente remarca la sonrisa, de naturaleza atrevida y descarada, posada en sus labios a modo de mofa.

"Perdón, hyung" respondió llevando sus manos a la gruesa piel de la espalda ajena, delineando los músculos que se marcaban debajo de ella y arañando con suavidad la zona lumbar.

Y se atrevió, claro que lo hizo, a dejarle un pequeño beso en los labios.

Taehyung lo miró estupefacto, con el gris de sus ojos adquiriendo un color brilloso, como la plata misma. Los labios ardieron en carne viva, deseando sentir nuevamente la boca del omega sobre la suya, por lo menos una vez para saciar su hambre de él.

"Tómalo como un beso de agradecimiento por hacer esto por mí" le dijo el menor en un susurro y sonriendo posteriormente, pero esta vez de manera más tímida y apocada.

El alfa lo envolvió entre sus brazos e inhaló profundamente, el olor del sudor era despreciable ante el suave aroma que el omega desprendía.

Dulce, pero no empalagoso.

Sin embargo, adictivo y embriagador.

Y así se sentía Taehyung, completamente ebrio, lleno y adicto del bonito omega que tenía debajo suyo, atrapado entre sus brazos. Únicamente deseó recuperarse rápidamente del orgasmo para volver a poseerlo, corromperlo sexualmente y hacerlo gritar como hace minutos atrás lo hacía.

Extasiarse de él hasta el hartazgo.

Aunque sabía que jamás se hartaría de Jeon Jungkook. No en esta vida.

"Um, hyung" el otro lo llamó con los ojos más grandes y abiertos de lo normal. El mayor lo miró sin poder creer la cantidad de estrellas que encontraba en ellos. "Si no vamos a seguir, ¿puedes salir, por favor? Ya me duele"

El alfa reaccionó y dejó de abrazar el chico, usó una de sus manos para sostener la cadera del joven y la otra contra el borde del condón para evitar que éste se salga mientras se arrastraba hacia atrás, saliendo del interior del omega.

Jungkook gruñó mientras sentía su agujero dilatado relajarse, amando las pequeñas dosis de dolor que experimenta al haber estado tan abierto y sintiendo que su entrada volvía a su tamaño normal nuevamente.

Jadeó cuando Taehyung salió completamente de él, sólo para arrepentirse y querer tener al alfa de nuevo dentro suyo.

Llenándolo. Sometiéndolo a su fuerza. Haciéndole contar las estrellas del cielo con los ojos cerrados.