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Los vítores estallaron en todo el gran estadio. El torneo de fútbol americano de la Academia está a punto de comenzar. Su competidor hoy es otra institución que siempre ha sido inconsistente.


Al ingresar a la cancha, Neteyam sonrió y saludó a los aficionados que se acercaron a vitorearlo en cortesía, aunque se sentía algo decaído ya que no había recibido respuesta a su invitación por parte de Ao'nung además que  su charla con Lo'ak no sintió que sirviera de mucho de echo fue lo todo contrario; "Posiblemente ya sean pareja y tu ni en cuenta y si le preguntas no creo que ella te responda, quizás te golpee por meterte en su vida personal" se supone que estaba tratando de animarlo no hacerlo arrepentirse de contarle su situación con la chica, sabia que no debía distraerse siendo que estaban a minutos del partido pero tenia esa "espinita" debido a el pendiente. 


La multitud en el estadio rugía con entusiasmo mientras el sol comenzaba a caer sobre el horizonte, tiñendo el cielo con tonos cálidos. El ambiente estaba cargado de emoción y expectación, ya que se avecinaba el esperado partido de fútbol americano entre los "Falcons" y los "Banshee's del este". Era una rivalidad de años, y ambos equipos estaban ansiosos por demostrar su valía en el emparrillado.


La tarde de otoño estaba llena de emoción en el estadio de la escuela preparatoria Awa'atlu. El cielo se teñía de tonos cálidos mientras el sol comenzaba a ponerse, y una multitud entusiasta se reunía para presenciar el emocionante partido de fútbol americano entre los "Falcons" de Oakridge y los "Los banshee's del este" Awa'atlu. El rugido de la multitud se mezclaba con la música estridente que emanaba de los altavoces, creando una atmósfera eléctrica. En el lado este del campo, un grupo de porristas vestidas con sus uniformes vibrantes y pompones en mano, se preparaban para animar a su equipo.


Las porristas se alinearon en la línea de banda, mirando con determinación hacia el campo. Sus caras estaban pintadas con los colores de la escuela, y sus cabellos brillaban con el brillo del entusiasmo. Al frente del grupo se encontraba Tsireya con una sonrisa radiante y una actitud llena de energía.


— ¡Vamos, Awa'atlu, vamos! -. Gritó Tsireya, levantando sus pompones al aire. El resto del grupo siguió su ejemplo al unísono. Los gritos y vítores resonaron en todo el estadio, entre esos gritos podrían apreciarse los gritos de Lo'ak que mientras entraba al estadio con el resto del equipo saludó apresuradamente a la líder del equipo de ese lado y ella respondió, pero debido a que la competencia estaba reñida, no podían acercarse y hablar entre ellos excepto a través del lenguaje corporal pero se vio interrumpida por un golpe por parte de uno de sus amigos que le dio un golpe detrás del cuello ya que "estaba comiendo frente a los pobres" y debía concentrarse. 


El equipo de fútbol americano de Awa'atlu estaba en el campo, listo para enfrentar a su rival en un emocionante partido. Los jugadores estaban concentrados y ansiosos por demostrar su valía en el campo. Pero antes de que el silbato del árbitro anunciara el inicio del juego, las porristas hicieron su magia.


El campo estaba perfectamente cuidado, con las líneas blancas trazadas de forma impecable. Los jugadores se calentaban y se concentraban en sus respectivos lados, mientras los entrenadores daban las últimas instrucciones. Los aficionados coreaban los nombres de sus jugadores favoritos y agitaban banderas con los colores de sus equipos.


El árbitro hizo sonar el silbato, anunciando el inicio del partido. La moneda fue lanzada al aire, y el capitán de los "Banshee's del este" ganó el sorteo, eligiendo recibir el balón en el kickoff. Los "Falcons" se alinearon en formación, listos para patear, mientras los "Banshee's del este" preparaban su equipo especial de retornadores.

𝐎𝐧 𝐭𝐡𝐞 𝐛𝐞𝐧𝐜𝐡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora