𝒊𝒙. 𝘥𝘢𝘮𝘯 𝘵𝘰𝘮 𝘬𝘢𝘶𝘭𝘪𝘵𝘻

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❛ 𝗗𝗢 𝗜 𝗪𝗔𝗡𝗡𝗔 𝗞𝗡𝗢𝗪?★
❪CHAPTER NINE;
damn tom kaulitz. . .❫

          ─── 𝓝o me sueltes la mano

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─── 𝓝o me sueltes la mano. ─── Bill ordenó, mientras sostenía su mano, adentrandola a la fiesta la cual parecía tener demasiada gente.

─── bien. ─── Jules asintio, siendo guiada por Bill hacia la barra de tragos.

Gustav, Georg y Tom, iban detrás de ellos.

Jules evitaba mirar hacia atrás e ignoraba el echo de que Tom estaba detrás suyo.

Había hablado con Bill y había decidido hacer lo correcto.

Lo correcto era hablar como personas civilizadas con Tom, y dejar de ignorarlo como si fuera una adolescente, aunque eso fuera.

Pero no lo haria esa noche. Lo haría al día siguiente, en un lugar tranquilo y cuando los dos estuvieran completamente sobrios.

Por ahora, disfrutaría de la noche y se prepararía mentalmente para algún rechazo. Aunque Bill le había dicho que eso no sucedería miles de veces.

─── ¿que vas a tomar? ─── Bill pregunto, llamando su atención, la tironeo de la mano obligándolas a sentarse sobre el banco a su lado.

─── lo que tu tomes. ─── respondió recibiendo un asentamiento por parte de Bill, ambos esperaron a que el chico de la barra atendiera.

Jules se estremeció al sentir que Tom se sentaba a su otro lado, rozando su rodilla con su mano.

─── puedes soltarle la mano Bill. No creo que se te escape. ─── Tom hablo en voz alta, lo suficiente para que Jules y Bill lo escucharán.

De algún modo, el echo de que Bill sostuviera la mano de Jules todo el tiempo comenzaba a enojarlo.

Quería ser el quien sostuviera la mano de Jules...

Jules pestañeo varias veces, dirigiendo su vista a su mano entrelazada con la de Bill.

─── no te molestes Tom, solo no quiero que se vaya por ahí todavía. ─── dijo Bill, divertido pora situación.

─── podrías soltarle la mano de igual manera, está al lado tuyo, te darás cuenta si se va. ─── Tom murmuró.

─── no tengo cinco años, podrían dejar de hablar de mí como si fueran mis niñeras. ─── habló Jules, sonriendo de lado cuando el bartender le entrego su bebida, igual a la de Bill.

Aún luego de decir eso, Bill siguió sosteniendo su mano, con el fin de ver cómo Tom lanzaba miradas furiosas a su dirección.

Jules tomo el pequeño vaso en su mano, llevándolo rápidamente a sus labios. El líquido ardió en su garganta, provocando que su boca formará una mueca.

𝗗𝗢 𝗜 𝗪𝗔𝗡𝗡𝗔 𝗞𝗡𝗢𝗪? ───, tom kaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora