Capítulo III

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No buscó su espada, pero se hizo de un gran hallazgo. ¡Tenía una sirena! ¡una mística sirena! No volvería a quedar en ridículo, era cuestión de que la vieran.

A punto de anunciarlo, recordó esos tiernos ojos que lo habían mirado con temor minutos antes...

Ni si quiera había entablado una conversación seria con él; pero, por algún motivo desconocido, sintió lástima y consideró que podrían hacerle daño.

- ¿Son tus amigos? - preguntó Felix.
- ¿Qué es eso? ¿Por qué brilla? - cuestionó el capitán.

Changbin se paró delante de la sirena - ¡Felix vete, no es nada! - indicó gritando.

Todos sus compañeros lo miraron como si fuera un loco y él se sintió verdaderamente loco ¿por qué actuó así, tan ilógica y precipitádamente?

- "¿Felix? No me llamo así"
- "¿Qué dice? ¿Qué esconde?"
- "Se demoró tanto que le agarró demencia"

El mayor se acercó a Changbin y lo empujó a un lado con el fin de ver lo que estaba ocultando. Este último sonrió nervioso - No hay nada, se lo dije.

El grupo ingresó al barco ignorando al "problemático novato", como le habían apodado.

Así como los demás, Changbin debía subir; pero, a sabiendas de que había una sirena suelta por ahí, no quizo hacerlo. Lo vió, se le acercó e incluso le habló ¡¿cómo irse sin más?!

El aprendiz buscó a su tesoro con la mirada. "Vete" le había dicho ¡pero no con intenciones de echarlo realmente! ¡¿Dónde estaría?!

- "Changbin, sube"

¿Dónde estás? - murmuró - ¡¿Felix?! - lo llamó en vano.

El pirata se desentendió por completo. Por un lado, quería que la sirena no se apareciese (en un intento de protegerla); pero, por otro, deseaba con ansias que lo hiciera y así recuperar a su más reciente éxito.

- "¡Changbin, sube!"
- "¿Qué le pasa?"
- "Apresúrate"

Sus ojos se llenaron de lágrimas de impotencia, pero no lloró.

¿Volveremos? - alzó la mirada - ¿Volveremos aquí? - preguntó.

Probablemente lo suspenderían durante un tiempo considerable, por lo que no importaba si iban a volver o no; él era conciente de eso.

Su superior respiró hondo y masajeó sus cienes - No entiendo qué te pasa. Probablemente sí ¿bien? Sube de una vez.

Changbin obedeció sin más, tirando su antorcha, esperanzado en que con eso la sirena lo recordaría.

Gracias por leer. Sé que fue corto, pero quiero ir adentrándolos poco a poco a la historia.

"𝙀𝙧𝙚𝙨..." - 𝘾𝙝𝙖𝙣𝙜𝙡𝙞𝙭 [𝘾𝘼𝙉𝘾𝙀𝙇𝘼𝘿𝘼] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora