Vampiros [ENHYPEN]

Capítulo 4

- Hee-Sung – Dije entre el beso – Pa... - no pude seguir hablando, correspondí mientras ubicaba mis manos en su nuca y él en mi cintura, dimos una pequeña vuelta y nos estábamos dirigiendo a su cama, se sentó en ella y justo nos separamos.

- No te vuelvas a ir, por favor, ______ - Me pidió apoyando su cabeza en mi abdomen.

- No me iré, tranquilo. Te quiero pedir perdón, tuve una idea errónea de ustedes, pensé que me matarían y...

- Ya no importa – Me interrumpió – Lo que importa es que volviste, Layla te extrañó bastante, pasaba todo el día en tu habitación.

- Yo también la extrañé bastante, además, un pajarito me contó que lloraste, ¿es verdad?

- Se ruborizó levemente – Puede ser, ¿qué? ¿Te da felicidad? – me miró expectante.

- Me da muchísima ternura y me provoca comerte a besos – Le di un beso corto.

- Si es así, lloro por ti todo lo que quieras.

- Después ya no vale – Tocaron la puerta – Voy – Fui a abrir la puerta encontrándome a Niki –

- Tu comida está lista, princesa – Acarició dulcemente mi mejilla izquierda.

- Ya voy, princeso -Dije y negó con la cabeza mientras se iba con una tierna sonrisa– ¿Vienes? – Me acerqué a él acariciando su cabello.

- Sí, después quieren desviar tu atención de mí – Dijo levantándose de la cama, puso su brazo alrededor de mis hombros y fuimos para la cocina.

- ¿Ya se arreglaron? – Preguntó Jake.

- Sipi – Respondí sonriendo.

- ¿Cómo le hiciste? – Sunoo frunció exageradamente su ceño.

- A punta de besos, se perdona a cualquiera – Dijo Heeseung.

- ¿A mi casi que ni me corresponde el abrazo y a ti te dio un beso? El favoritismo – Dijo Jay entregándome un tazón con cereal y yogurt.

- Será con ustedes, a mí me dio un beso sabroso – Murmuró Sunoo y todos fijaron su vista en mí.

- En fin, los presumidos – Musitó Sunghoon – Yo no sé cómo vas a hacer, pero quiero mi beso – Dejé de comer y me paré a darle un beso a cada uno, cuando iba a darle un besito a Niki sentí un dolor horrible en el cuerpo, segundos después me caí. Todos, totalmente preocupados se acercaron a mí – A comenzado su transformación, Jay duérmela para que no le duela.

- Si – Dijo el susodicho antes de tocarme y luego todo se volvió negro.