Me Gusta Tu Novio // Young Royals//

6: Tentaciones

Narra Simón

La noche cayó y no me sentía con ánimos para ir a la fiesta, más aún sabiendo que Wilhelm estaría ahí, sabía que verlo de frente sería aún peor, por el bien de mi salud mental, tenía que controlar mis celos irracionales.

- ¿Qué haces hermanito? - Sara entró al cuarto con cierta cara de preocupación al verme - ¿No deberías arreglarte para la fiesta de hoy?

- No tengo ganas, quizás después - Me acomode tratando de ignorarla y se sentó a mi lado en la cama -

- Estabas muy emocionado por ir, ¿paso algo? - Por un momento pensé en contarle pero que estúpido iba a sonar todo cuando ella claramente me dijo que pasaría algo así y yo la llame loca-

- No pasa nada, solo estoy cansado - Sara rodó los ojos y hablo con ese tonito tan molesto que tienen las hermanas para regañar -

- No hagas nada de lo que después puedas lamentarte Simón, huir de tus problemas no es la solución - Se levantó y volvió a dejarme solo en el cuarto -

Quizás Sara tenía razón y huir de los problemas no era válido, pero no sabía como enfrentar una situación así, ¿qué se supone que le dijera a Wilhelm?

- "Oye ya decidí que siempre si creo que me gustas, lamentó portarme como un idiota contigo".

Incluso cuando yo lo digo suena estúpido, me siento una basura de persona, por Wilhelm, por Marcus, si quiera pensarlo me hace querer golpearme. Pero supongo que al final Sara tiene razón o simplemente tiene muy buenas tácticas para disuadir a la gente, no puedo huir para siempre y no pienso hacerlo.

Me arregle y me dispuse a ir a la fiesta, solamente con el pensamiento de que pase lo que tenga que pasar.

Narra Wilhelm

Apenas llegue al lugar el aroma a alcohol y cigarro fue más que evidente, uno que otro aroma ilegal se colaba en el lugar, me acerqué a la barra con una firme intención, ponerme lo suficientemente ebrio como para, quizás, no ser capaz de regresar por mi cuenta al campus.

Pude ver a August a lo lejos, quien se acercó a mi con todos sus amigos rodeandome.

- Que bueno que si vino príncipe, ¿ya tomó algo? - Sólo negué con la cabeza y me sirvió un vaso lleno hasta el topé -

- Gracias, supongo - Le recibí el vaso -

- Toma todo lo quieras, la noche es larga príncipe coronado - Chocó su vaso con el mío gritando "salud" y nos acabamos el contenido de un solo trago -

La noche siguió su curso y cada vez me sentía más ebrio, August no me soltaba y seguía sirviendome un vaso sobre otro.

levaba ya por lo menos unos 7 tragos encima, cuando aquel chico de pelo rizado entró por el gran portón de metal, lo mire unos segundos pero no me moví de mi lugar, me miró y a pesar de mantener contacto visual unos segundos, mi mirada se fijó de nuevo en el vaso entre mis manos, mientras me lo llevaba a la boca para acabarme lo que quedaba en el.

Cuando el vaso estuvo vacío, caminé a pasos torpes hacia la pista de baile tratando de ignorar su presencia, me integre con todos llenó de energía y alegría, quizás provocada por la gran cantidad de alcohol en mi sistema, entre tanto alboroto sentí que me miraban fijamente, de nuevo era Simón, pero esta vez su mirada era diferente, sus ojos me gritaban que por favor me acercará, que fuera con el, pero no estaba dispuesto a caer tan rápido.