Narra Wilhelm
Han pasado cinco días, después de el pequeño incidente con Marcus y aún no se a atrevido a poner un pie cerca de la escuela, pero igualmente, todos los días sin falta llevo a Simón hasta la parada de autobús hasta que pasa, aunque me insiste que no es necesario, no puedo quedarme tranquilo sabiendo que ese idiota lo pueda lastimar.
Es raro que me sienta así, tan protector con el, tan cuidadoso, fui el primero en decir que no debería involucrarse de más y aquí estoy, pero muy a pesar de lo que siento no me puedo permitir quererlo así, no ahora por lo menos.
Hoy, durante la tarde tuvimos entrenamiento de remo, los entrenamientos esta semana han sido bastante pesados ya que estamos cerca de las competiciones y August esta más exigente que nunca, lo que en parte puede resultar molesto.
─ ¡Atentos todos! ─ August gritó y sonó su silbato ─ Los necesito más preparados que nunca y no estoy viendo resultados, el campeonato esta cerca y no voy a aceptar errores, así que necesito que den su doscientos por ciento, no quiero distracciones ─ Al hacer este último comentario volteo a verme a mi y a Simón ─.
Sentí que algo en mi sangre hirvio con ese simple gesto, quizás es algo bastante estúpido pero las miradas de burla de todos los presentes me hicieron querer golpear a August directo en su estúpida cara.
No me molestó que sugiriera que Simón y yo traemos algo, me molestó que lo hiciera de esa forma frente a todos como si nos la pasaramos agarrados de la mano y besandonos. Al terminar el entrenamiento note que August no apartaba la mirada de mi en los vestidores, estaba a punto de salir cuando puso su mano en mi hombro obligandome a retroceder.
─ ¿Necesitas algo? ─ intenté sonar amable ─
─ En realidad no, solo me causa curiosidad el pequeño experimento social que llevas haciendo hace días con Simón ─ Soltó una ligera risa ─ ¿Se trata de alguna buena obra de caridad príncipe?
─ Sólo me estoy divirtiendo un rato métete en tus asuntos August, yo me encargo de los míos ─ Lo miré fastidiado ─
─ Wilhelm, se bien que te importa una mierda la corona, pero a mí si me importa, yo si quiero ser un buen miembro de la familia real y por ello me gustaría aconsejarte algo ─ Me rodeó por lo hombros tratando de verse amistoso ─ Elige bien con quién te acuestas, hombre o mujer, pero que sea de tu clase...
Reí con ironía al escuchar sus palabras, lo decía el mismo tipo que se las dió de todas mías con cuánta se le cruzó el año pasado sin importar su clase.
─ Bien lo acabas de decir August, da igual con quién me acueste, así que si a mi me gusta coger con Simón o con cualquier estúpido de este campus es mi pene y yo sé dónde lo pongo. ─ Sonreí alejándolo de mi ─
─ Cometes un error Wilhelm, el no pertenece a nosotros y el futuro rey no puede ser gay y menos novio de un don nadie como Simón ─ Sonrió burlón ─
─ Tampoco es como que el príncipe pueda ser un drogadicto August ─ Lo mire desafiante ─
─ Se que yo haría un mejor trabajo que tú, a ti solo te gusta desafiar a la familia real, no tienes el mínimo respeto por las costumbres y serás un completo desastre como rey ─ Espeto molesto ─
─ Quizás tienes razón, pero igual el título lo sigo teniendo yo y no puedes hacer nada al respecto, mejor preocúpate por qué tú madre no se gaste la herencia de tu padre en tu nuevo papá, yo puedo resolver mi vida solo ─ Le dedique una última sonrisa llena de satisfacción y salí de los vestidores ─
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Me Gusta Tu Novio // Young Royals//
FanfictionDonde Marcus y Simón son novios, pero Wilhelm es el tercero en discordia. ^Puede contener narraciones eróticas leer con discreción^